CIUDAD REAL

Habitantes: 65.703  Altitud: 635 m.  Gentilicio: Ciudad-realeño Y/o Culipardos 
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Situación:

La provincia de Ciudad Real se halla situada en el corazón de España. Comienza en las faldas de los Montes de Toledo para acabar al pie de la legendaria Sierra Morena. Tiene una extensión de 20.000 km cuadrados. El río Guadiana la cruza en un amplio y dilatado arco.
Ciudad Real pertenece a La Mancha, una región natural de austera belleza. Escritores y artistas españoles han buscado en ella inspiración y lamento. Cervantes hizo cabalgar a su Don Quijote por estos caminos, bajo el sol y sumergido en un ensueño quimérico, en un doloroso intento de salvación. Pueblos blancos perdidos por la inmensa llanura evocan los hitos de la peregrinación del Caballero de la Triste Figura.
Es una tierra parda, horizontal e inmensa, seca y guerrera. La Mancha es campo de vino y pan y, de vez en vez, sobre la llanura y remontados sobre las lomas, abren sus espantados miembros los molinos de viento.

Monumentos:

Ciudad Real es una antigua ciudad fundada en 1255, que conserva vestigios de su pasado.
De su historia guerrera queda en pie la Puerta de Toledo, una de las antiguas puertas de la ciudad y es una de las mejores muestras en Castilla de la arquitectura mudéjar, en piedra, que conserva inscripción de la época.
Del Alcázar que erigiera el rey de Castilla y León, don Alfonso X el Sabio, tan sólo queda un lienzo de su muralla.
La Catedral está bajo la advocación de Santa María del Prado. Fue construida en 1531 en fábrica de piedra, cal y canto, con arcos sillares y es una de las tres únicas iglesias góticas –junto con las de Coria y la de Santiago el Real de Logroño- de una sola nave, colosal y sobrecogedora, quizá la mayor de España, iluminada por un gran rosetón ojival.
La iglesia más antigua es la de Santiago, de cuando Ciudad Real no era ciudad sino Villa Real. Pero la más artística es la de San Pedro, construida entre los siglos XIV y XV. En la fachada principal luce una claraboya y una puerta gótica con cinco archivoltas y extraña decoración bizantina. Dentro de la iglesia, en la capilla del Sagrario, se encuentra el sepulcro del Chantre Coca, fundador de esta capilla, una de las piezas más perfectas de nuestra escultura funeraria. La fina ejecución de la estatua yacente, de estilo hispano-flamenco, recuerda al Doncel de Sigüenza.

Fiestas:

En la Mancha se mantiene viva la tradición de las canciones de plazuela; las mozas, siguiendo una tradición de abuelas a nietas, cantan romances con alegres tonadas de seguidilla, que es la danza más popular. Se acompañan con bandurria, laúd, guitarras y panderetas, mientras se oye el repiqueteo de las castañuelas de los que bailan.

Las fiestas mayores de la capital son el 15 de agosto, en conmemoración de la Virgen del Prado, Patrona de la ciudad. Hay desfile de carrozas y batalla de flores.

La Pandorga: 31 de Julio.

Costumbres:

El arte culinario de Ciudad Real es el producto de una sabia conjunción entre la comida castellana –aún estamos en zona de asados-, y la aromática cocina oriental. En Ciudad Real son también características de su cocina los “galianos”, la perdiz en salsa o escabechada, los típicos asados de cordero y conejo, los gazpachos, las migas, las gachas “ilustradas” con chorizo y lomo, el pisto, las calderetas y una amplia gama de postres y confitería, entre los que destacan las tortas de Alcázar, las madalenas de Carrión, dulces de Almagro, “bartolos”, rosquillas y barquillos y los mantecados de Moral de Calatrava. Para tomar como aperitivo, el célebre queso manchego –que se toma a cualquier hora-, las berenjenas y los cangrejos.
Los vinos, como el queso, han hecho famosa la despensa de esta provincia. Se dan magníficos vinos blancos y tintos, aparte de contar con estupendos brandys, anisados, mistelas…, incluso espumosos.
Hay que beber este vino de viña de llanura al borde de las cavas de las bodegas de Valdepeñas, Tomelloso, Campo de Criptana y Alcázar de San Juan.

Historia:

El origen histórico de la provincia fueron las Órdenes Militares. Zona fronteriza entre la cristiandad y la pujante civilización árabe, nace a la vida en un doloroso trance de guerra y destrucción. El Gran Priorato de San Juan, la Orden de Calatrava y los legendarios Caballeros Templarios, fueron, poco a poco, adquiriendo fuerza suficiente para amenazar la autoridad del poder real. Alfonso X el Sabio, rey de Castilla, para contrarrestar el creciente poder feudal de las Órdenes, mandó erigir Villa Real y la rodeó de murallas “con ciento veinte torreones”. En premio a su hábil gestión, le concedió fueros y franquicias y el título de ciudad -Ciudad Real-.
Toda la provincia se halla salpicada por castillos y fortalezas, alcázares y torres vigías, testimonios inexcusables de su pasado turbulento y peligroso.
CULIPARDOS: seria el gentilicio histórico de los habitantes de la ciudad.

Turismo:

Tres sugestivas excursiones pueden realizarse desde Ciudad Real, recorriendo muy poca distancia:
- Una, a la ermita de Alarcos, erigida en memoria de la batalla de Alarcos.

- Otra, al castillo de Calatrava, fortaleza árabe que fue conquistada por Alfonso VII de Castilla y que la cedió a los Caballeros Templarios que, incapaces de defenderla, se la devolvieron de nuevo al rey, sin que nadie se atreviera a aceptarla. Al fin, dos monjes del Cister, el abad Raimundo y fray Diego de Velázquez, se decidieron, fundando el abad una nueva orden, la Orden de Calatrava.

- La tercera excursión, a sólo 20 kilómetros, a Almagro, cuna del conquistador del Perú y adelantado de Chile, Diego de Almagro. Cuenta la ciudad con una joya y reliquia inigualable para la historia del teatro, el Corral de Comedias en la Plaza Mayor, donde se representaron las primeras obras de teatro en España. Consta la plaza de dos hileras de casas porticadas, a ambos lados, con doble galería de miradores, bajo techos ya ondulados por el peso de los años. Almagro, además, es el centro artesano donde mujeres y mozas tejen las blondas y encajes a la manera de sus antepasados, desde que enseñaron este arte las damas del séquito flamenco de doña Juana la Loca a su paso por esta ciudad camino del reino de Granada.