La
villa de Sumbilla organiza su
caserío en dos
barrios situados a ambos lados del
río Bidasoa, que quedan unidos por un
puente antiguo, aunque se ha levantado otro
moderno próximo a la
parroquia. Su trazado urbanístico viene condicionado por la disposición de dos ejes principales en una combinación
típica de
pueblo-
calle y pueblo-puente, el primero de ellos de disposición Norte-Sur constituido por la
carretera que
conduce de Pamplona a Irún, y el segundo Este-Oeste siguiendo la
dirección del puente que comunica los dos núcleos. La calle que atraviesa la carretera es la calle Mayor; y constituye la
principal arteria de la localidad. En ella se alinean, tanto a un lado como al otro, buenas
casas de
arquitectura popular, exentas, de
fachadas enlucidas aunque el nivel inferior es de sillar o sillarejo, delimitando sus extremos cadenas de sillar rojizo, lo que tiende a marcar aún más su singularidad; en
altura se suceden indistintamente las de tres y
cuatro pisos, cubriéndose con
tejados a dos o cuatro vertientes. Las
puertas de ingreso generalmente son adinteladas, aunque puede comprobarse también la presencia de
arcos de medio punto y rebajados.