El banquero de los pobres patrocina empresas sociales
El Premio Nobel de la Paz Muhammad Yunus expone en un libro sus ideas para combatir la pobreza.
Antonio Paniagua/Colpisa. Madrid
Es conocido como el banquero de los pobres y ahora puede erigirse en el empresario de los menesterosos. El Premio Nobel de la Paz Muhammad Yunus se ha volcado en el combate de la pobreza en su país, Bangladesh, a través de los programas de microcréditos para la puesta en marcha de pequeñas empresas, cuyas titulares ... (ver texto completo)
El Premio Nobel de la Paz Muhammad Yunus expone en un libro sus ideas para combatir la pobreza.
Antonio Paniagua/Colpisa. Madrid
Es conocido como el banquero de los pobres y ahora puede erigirse en el empresario de los menesterosos. El Premio Nobel de la Paz Muhammad Yunus se ha volcado en el combate de la pobreza en su país, Bangladesh, a través de los programas de microcréditos para la puesta en marcha de pequeñas empresas, cuyas titulares ... (ver texto completo)
El objetivo del modelo complementario al capitalismo que propugna esta mezcla de Quijote y banquero es el de hacer frente a las necesidades más perentorias de la humanidad. Todas y cada una de las empresas sociales no solo crean empleo, sino condiciones laborales decentes, además de intentar atajar patologías sociales como el analfabetismo, la deficiente dotación sanitaria o la falta de alimentos.
Yunus no ha despreciado la colaboración con las grandes corporaciones. En 2005 propició una sociedad conjunta entre Danone y las empresas de la órbita del Banco Grameen.
La alianza, bautizada como Grameen Danone, pretende mejorar la deficiente nutrición de los niños de Bangladesh mediante la producción de un yogur. El precio del producto es asequible a los bolsillos de los demás pobres, con la particularidad de que el yogur está enriquecido con todos los micronutrientes que están ausente en la dieta de los niños bangladeshíes: hierro, zinc y yodo, entre otros componentes. De esta manera, con la ingesta de un par de yogures a la semana, la nutrición del niño alcanza niveles óptimos.
A Danone se han sumado empresas como Veolia Water Company, que suministra agua potable en Bangladesh; BASF, que fabricará y venderá mosquiteras a un precio muy reducido; Intel Corporation, que en un futuro utilizará la tecnología de la información para mejorar la sanidad, o Adidas, que velará por que ninguna persona ande sin zapatos.
La obra incluye casos, anécdotas y la sólida experiencia del profesor Yunus. De él dijo Jimmy Carter, expresidente de Estados Unidos, que "al dar a los pobres el poder de ayudarse a sí mismos, el doctor Yunus les ha ofrecido algo más valioso que un plato de comida: la seguridad en su forma más fundamental".
Ni pérdidas ni ganancias
De acuerdo con el modelo de Yunus, la empresa social es una compañía sin "pérdidas ni ganancias", pues se dedica exclusivamente a perseguir un objetivo de naturaleza social. Su iniciativa garantiza la solvencia, dado que quienes invierten en estas empresas recuperan el dinero con el tiempo, pero jamás reciben dividendos que superen la cantidad invertida.
El Banco Grameen es un ejemplo de este tipo de empresa social, en la que los accionistas son los propios prestatarios. El nacimiento del banco es un ejemplo del empuje y la tenacidad de Yunus. La entidad empezó como un cobertizo con tejado de zinc, una mesa, una silla y dos bancos. Ni electricidad ni teléfono.
Pese a la parquedad de los medios, las ideas del pionero de los microcréditos se abren paso. No en vano, el pasado 28 de junio se instituyó el Social Bussines Day, una celebración que trata de estrechar la alianza entre empresas y proyectos sociales.
Con su filosofía humanista Muhamamd Yunus ha hundido el bisturí en el núcleo de la pobreza para atender a la población misérrima de su país, los más pobres entre los pobres: las mujeres.
Acostumbrado a trabajar con ellas, Yunus sabe de la proverbial sensatez de las mujeres en el manejo del dinero. El economista bengalí sostiene la tesis de que la crisis actual no se habría producido si el mundo financiero lo gobernaran mujeres en vez de hombres. Muhammad Yunus aduce que ellas son mucho más cautelosas y no hubieran asumido tantos riesgos.
A causa de la crisis económica que estalló en 2008, el profesor Yunus se planteó la necesidad de dos tipos de negocios: uno para la obtención de un beneficio personal, otro dedicado a ayudar a los demás.
En el primer tipo de negocio, el objetivo es maximizar los beneficios para los propietarios. En el segundo, todo está diseñado para el bienestar y beneficio de los demás, al margen de los propietarios. Estos solo obtienen la recompensa moral de servir a una buena causa. El segundo tipo de empresa, edificada sobre la parte desinteresada de la naturaleza humana, es la empresa social, la que precisamente ha estado fuera de la teoría económica imperante.
Según avanza la editorial, la empresa social nace como un negocio desinteresado. Como la firma está por completo abocada al interés social, toda idea de beneficio personal queda anulada. A lo sumo, el propietario, al cabo de un periodo determinado de tiempo, puede retirar la cantidad invertida.
Fuente El Heraldo de Soria ... (ver texto completo)
Yunus no ha despreciado la colaboración con las grandes corporaciones. En 2005 propició una sociedad conjunta entre Danone y las empresas de la órbita del Banco Grameen.
La alianza, bautizada como Grameen Danone, pretende mejorar la deficiente nutrición de los niños de Bangladesh mediante la producción de un yogur. El precio del producto es asequible a los bolsillos de los demás pobres, con la particularidad de que el yogur está enriquecido con todos los micronutrientes que están ausente en la dieta de los niños bangladeshíes: hierro, zinc y yodo, entre otros componentes. De esta manera, con la ingesta de un par de yogures a la semana, la nutrición del niño alcanza niveles óptimos.
A Danone se han sumado empresas como Veolia Water Company, que suministra agua potable en Bangladesh; BASF, que fabricará y venderá mosquiteras a un precio muy reducido; Intel Corporation, que en un futuro utilizará la tecnología de la información para mejorar la sanidad, o Adidas, que velará por que ninguna persona ande sin zapatos.
La obra incluye casos, anécdotas y la sólida experiencia del profesor Yunus. De él dijo Jimmy Carter, expresidente de Estados Unidos, que "al dar a los pobres el poder de ayudarse a sí mismos, el doctor Yunus les ha ofrecido algo más valioso que un plato de comida: la seguridad en su forma más fundamental".
Ni pérdidas ni ganancias
De acuerdo con el modelo de Yunus, la empresa social es una compañía sin "pérdidas ni ganancias", pues se dedica exclusivamente a perseguir un objetivo de naturaleza social. Su iniciativa garantiza la solvencia, dado que quienes invierten en estas empresas recuperan el dinero con el tiempo, pero jamás reciben dividendos que superen la cantidad invertida.
El Banco Grameen es un ejemplo de este tipo de empresa social, en la que los accionistas son los propios prestatarios. El nacimiento del banco es un ejemplo del empuje y la tenacidad de Yunus. La entidad empezó como un cobertizo con tejado de zinc, una mesa, una silla y dos bancos. Ni electricidad ni teléfono.
Pese a la parquedad de los medios, las ideas del pionero de los microcréditos se abren paso. No en vano, el pasado 28 de junio se instituyó el Social Bussines Day, una celebración que trata de estrechar la alianza entre empresas y proyectos sociales.
Con su filosofía humanista Muhamamd Yunus ha hundido el bisturí en el núcleo de la pobreza para atender a la población misérrima de su país, los más pobres entre los pobres: las mujeres.
Acostumbrado a trabajar con ellas, Yunus sabe de la proverbial sensatez de las mujeres en el manejo del dinero. El economista bengalí sostiene la tesis de que la crisis actual no se habría producido si el mundo financiero lo gobernaran mujeres en vez de hombres. Muhammad Yunus aduce que ellas son mucho más cautelosas y no hubieran asumido tantos riesgos.
A causa de la crisis económica que estalló en 2008, el profesor Yunus se planteó la necesidad de dos tipos de negocios: uno para la obtención de un beneficio personal, otro dedicado a ayudar a los demás.
En el primer tipo de negocio, el objetivo es maximizar los beneficios para los propietarios. En el segundo, todo está diseñado para el bienestar y beneficio de los demás, al margen de los propietarios. Estos solo obtienen la recompensa moral de servir a una buena causa. El segundo tipo de empresa, edificada sobre la parte desinteresada de la naturaleza humana, es la empresa social, la que precisamente ha estado fuera de la teoría económica imperante.
Según avanza la editorial, la empresa social nace como un negocio desinteresado. Como la firma está por completo abocada al interés social, toda idea de beneficio personal queda anulada. A lo sumo, el propietario, al cabo de un periodo determinado de tiempo, puede retirar la cantidad invertida.
Fuente El Heraldo de Soria ... (ver texto completo)