Compramos energía a futuro
        

Respuestas para La Lydia:

Hola Patxi,
¿estáis seguros que sois de Pamplona? Tengo mis dudas....
¡Qué pasión por Herrera!
Saludos a todos los hermanos y hermana.
Hola Lydia... La verdad es que si tenemos pasion por Herrera, nos encanta. Este miercoles tuve que ir a Valladolid (viaje de ida y vuelta), me acompañaba Chus y de regreso no hizo falta convencernos para desviarnos y terminar tomando un cafe en la Placilla.... cafe, y a Pamplona. Regresamos a casa con otra cara y comentando lo poco que queda para Semana Santa. Hoy, esta mi hermano Manolo que ha ido a pasar el fin de semana! que envidia!, pero bueno 31 dias y nos vemos!
Un
Realmente, es irónico... no tienen ni para zapatillas pero, están brindando con champagne. ¡Hurra por ellos!
No se si os acordáis que a la hora de la merienda, el pan mojado con vino y azúcar estaba riquísimo....
Yo era adicta a la Quina... Y eso que comentas, Gigantea, de las galletas mojadas, era la bienvenida que nos daban en los pueblos cuando íbamos con mi abuelo a repartir el pan (con un carro y la mula). Mi abuela regañaba a mi abuelo porque decía que luego no teníamos ganas de comer... ... (ver texto completo)
Lydia, cuando has hablado del pan con vino y azúcar me he ido a la cocina y me he preparado una rebanadita para experimentar aquél sabor y, casi, casi, ha sido como entonces, ¡buenísimo!. Pero recordarás también que teníamos una gama más amplia para combinar con el pan: aceite y azucar ¡delicioso!, y lo que para mi paladar era una auténtica sinfonía: aquella blanquísima manteca (con jerejitos) untada sobre el pan y aderezada, cómo no, con azúcar.
Un beso para la Goyita. Aunque solemos hacer las orejuelas en casa, este año, me traje una caja a Madrid y mi madre comentó que eran igualitas a las de casa, ¡riquísismasssss! (Y para que ella diga eso, ya es...)
En fin. Ahora mismo las orejuelas se alojan en algún lugar de mi cadera, etc...
Allí bien están.
Lidia guapa, nos alegramos que a tu madre la gustaran tanto las orejuelas.
Un beso muy fuerte para todos.
Ay, mi Raquel, cómo dobla la piernecita....
Estáis las tres para comeros. ¡Qué guapas!
Mi agradecimiento y mi admiración por la mistad y el cariño de La Lidia, Chus, Violeta y otras amigas que después de más de 30 años mantienen a mi hermana Raquel en el recuerdo.
Hola a todos!
Buena foto Patxi! Qué bueno, todos los "pamplonicas" como os llamaba mi abuela, subidos al carro.
Yo tengo una foto subida al burro de mi tio Fermín.
Y me acuerdo mucho de la señora Paula, y ¿os acordáis de la señora Petronila, que vivía enfrente y que estaba sentada en la silla? Uf, cuánto jugábamos en la calle Doctor Abad.
Hola LYDIA.>.. Me agradaría mucho poder ver esa foto que dices tener subida al burro de tu tio Fermín. Por favor cuelgala en este foro..
Qué foto más bonita! Mi tía Angelines tenía 15 años y esta foto, según ella, se tomo en el mes de diciembre y en el día que se casaba su hermana mayor, Jose, mi otra tía. Al parecer están todas sus amigas y vecinas.
Buena foto, Fernan.
Bienvenida al foro, Lydia. Te conozco un poquito por Chus y las fotos que ha aportado. Según cuentas eres sobrina de Angelines Espinosa. Me pregunto si tú tía tendrá algún parentesco conmigo, pues yo también me apellido Espinosa. Un saludo
Todos tenemos anécdotas con los "fieros" cabezudos.
Yo, perdí una rebeca, porque al salir de misa, me topé con ellos y en una loca carrera se me cayó. Fui incapaz de regresar a recuperarla, con el consiguiente cabreo de mi abuela, la señora Pepa, que me puso de "abulto" hasta arriba.
Y luego, claro, a lo mejor Chus se acuerda, de una "trampa mortal" en la que caímos en el portal de la antigua panadería de Prieto. Uf, todavía recuerdo los nervios, todas apelotonadas gritando....
Entonces lo ignorábamos, ... (ver texto completo)
¿Cómo no recordar la anécdota de los temibles cabezudos en la panadería de Prieto? No he podido olvidar la escena, apelotonadas en el WC (un espacio diminuto), gritando como posesas y un cabezudo al otro lado de la puerta intentando entrar.... y el cerrojo que parecía que cedía, y otro asomando su cabezón por el ventanuco.....
Recuerdo otro ataque de pánico vivido por la misma época, pero a unos cuantos kilómetros de distancia. Al acabar la EGB del año 74-75, las del colegio de las monjas vinieron ... (ver texto completo)