LA RESERVA DE LA SALUD
La reserva del carburante del vehículo que conduces es parecida a la reserva de nuestra salud, a veces piensas que se te ha encendido la luz de dicha reserva, y piensas en echar carburante antes de que te quedes tirado en cualquier raro lugar, si no actúas con sentido común, terminas maldiciendo tu memoria tan frágil. La salud es parecida, pero si te deja tirado, a veces no hay vuelta atrás, abusamos de nuestra reserva de salud, y pensamos casi siempre que las enfermedades raras, infartos o ictus, les pasan a otros, Que las vacunas nos protegen de caer en esas malas enfermedades. Más eso es falso, hay vacunas que te pueden dejar mucho peor que la propia enfermedad para la que fue proyectada, Pero si tu salud tiene buena reserva aguantas lo que sea preciso, para salir de tan mal camino. Eso sí un poco más mermado de fuerza y de salud. El cuerpo humano también tiene esa luz de alerta, a la que apenas escuchamos, si llegamos agotados a nuestra casa, o nos fallan los nervios, si notamos que la vista te da vértigos, o si notas que no puedes dormir a gusto, está encendiéndose la alarma de tu salud, estás tirando de tu reserva, sin que quieras hacerte tu mismo caso, piensas que todo pasará, cuantos humanos habrán pensado eso, “todo pasará”, esto es sólo una mala racha, que mi cuerpo aguantará y no me quiero meter en médicos, ya que siempre te sacan goteras, y mucho más cuando te haces mayor. Más cuando el aviso es mortal, en esos momentos debes de pensar, Si hubiera ido al médico a tiempo, le podía haber avisado de mis problemas, ahora seguro que no llegó al hospital, se me termina la vida, no me queda reserva ni para pensar, Soy hombre terminado, no tengo solución, mi maquinaria no responde. Y así o parecido se marchan muchos humanos de esta vida, no les quedaba reserva de salud, y se dejaron llevar por sus malas influencias. Pensamos un poco, que los automóviles y los humanos somos distintos, ellos son metales y cristal, y se les puede echar un remiendo, a los humanos es mucho más difícil. Termina tu vida sin apenas darte cuenta. G X Cantalapiedra.
... (ver texto completo)