Pueblo Riojano de raices Navarras, cabalgó durante cinco
siglos, entre
Navarra y Castilla. Incorporado a la corona castellana por conquista, a finales del S. XIV, principios del XV. Su imponente silueta, aclara su pasado guerrero como punta de lanza de Navarra frente a Castilla. Su
escudo heráldico así lo refleja.