Mensajes enviados por Carlos Etxeba:

Alberto Rodrigo sabe dar a sus cuadros rurales una instantánea pictórica de un ambiente local inigualable. En este cuadro nos sitúa en una callejuela de Villacalabuey donde aparece reflejarse hasta la hora de la mañana en que se ha pintado el cuadro. Aquí se trata de las once de la mañana aproximadamente de un día soleado de Julio porque las sombras están teñidas de un suave azul violeta, han comenzado a agrandarse y el cielo veraniego resplandece.

Frecuentamente Alberto Rodrigo en sus cuadros ... (ver texto completo)
Es un cuadro sorprendente. Una casa rural que tiene rasgos arquitectónicos de una llamativa reciedumbre agónica El pintor ha sabido descubrir esta lucha del tiempo entre los muros de la casa Amable. En la parte inferior del cuadro se nota la decadencia rural de una casa cuyos moradores la han dedicado a humildes labores rurales, amontonándose en su derredor tubos, puntales, escaleras, tierras y plantas sin ningún orden ni concierto, mientras que en la parte superior del cuadro se señala con gran ... (ver texto completo)
Un realismo mágico rodea este paisaje al óleo de Bustillo de Cea del pintor Alberto Rodrigo. Las nubes se arrastran perezosas amontonándose en fríos azules y violetas distantes y por la parte inferior del cuadro se desliza una luz cálida misteriosa que enfoca a unas casonas tan realistamente pintadas que se podrían tocar con las manos. Este cuadro engaña tanto al espectador que si fuera de tamaño natural nos invitaría a adentrarnos dentro de él y a pasearnos por la carretera florida circundante. ... (ver texto completo)
Magnífico cuadro de Alberto Rodrigo, estructurado en dos partes claramente diferenciadas. La parte inferior del cuadro, más próxima al espectador, está matizada en verdes, rojos, grises y amarillos, dando la sensación de una proximidad bucólica, de reposo y alivio, mientras que la parte superior del cuadro, alejada e imponente, es una montaña excelsa, matizada en grises, azules y blancos que contrasta fuertemente con el primer plano del cuadro. Un contraste logrado admirablemente por los pinceles ... (ver texto completo)
La esmerada composición de este cuadro corre parejas con la variedad colorística del mismo. Los rojos y ocres de las casas se funden con los azules y grises del cielo, del río y del camino. Hay dos elementos temáticos sicológicamente insinuantes: el puente que une los dos lados del cuadro y la torre de la iglesia vigilante al fondo. Bravo por Alberto Rodrigo.
La espontaneidad y seguridad en el trazo son características esenciales de la aguada. Aquí hay una perspectiva ascendente en tramos irregulares donde la mano del pintor ha logrado captar hasta la sombra que las casas de la derecha arrojan sobre las calzadas de Mallona. Unas manchas blancas en el primer plano dan una perspectiva excelente acercándolo al espectador. Enhorabuena a Alberto Rodrigo porque la seguridad, espontaneidad y belleza de esta aguada son extraordinarias.
Acuarela colorística de un entorno urbano de Bilbao donde la seguridad del trazo del pintor llama poderosamente la atención. El kiosko y los árboles otoñales configuran el primer plano, pero a través de ellos en un segundo plano el teatro Arriaga alza su silueta esbelta. El cuadro cobra vida al poner mucha gente paseando por el Arenal. Excelente
composición pictórica y realización en grises verdosos muy acordes con la estación otoñal. Bravo por el pintor Alberto Rodrigo.
El pintor Alberto Rodrigo pinta también los paisajes urbanos con una gran delicadeza, trasladando al pincel todo el contenido humano que una plaza en este caso puede incitar al subconsciente. Para él las casas tienen la misma historia que las personas que las habitan o que las han habitado. En este cuadro la plaza en semisombra juega a la luz con el cielo abierto y claro. Enhorabuena.
En este cuadro hay una casa en la parte inferior del cuadro, como hundida entre los pliegues y follaje del terreno, para dar paso a las lomas de la montaña que caminan en ondulaciones hacia la altura y en la parte superior del cuadro Los Picos de Europa, metafísica estructura pintada con trazos duros azulados y nebulosos. Tanto la parte inferior como la media del cuadro sirven para realzar la elevada grandeza de las elevadas montañas. Estupendo cuadro de Alberto Rodrigo.
Una casa a media altura del cuadro que sirve de interlocutor pictórico entre la parte inferior del cuadro, abigarrada mezcla cromática en verdes y grises, y la parte superior del cuadro en azules luminosos donde predomina la montaña, proeza absoluta de la naturaleza. Excelente cuadro de Alberto Rodrigo
Este cuadro es una exaltación pictórica de un monumento histórico. Dos pináculos dominan el cielo orgulloso de cobijar tanto arte y tanta historia. Enhorabuena a Alberto Rodrigo.
Una joya pictórica de Alberto Rodrigo pintada con suma delicadeza. Entre el cielo y la tierra en contraste con edificios de colores térreos sobresale un arco marmóreo histórico que da paso a la leyenda. Enhorabuen a Alberto Rodrigo.
El arroyo del desfiladero contrastado con el cielo agobiado entre riscos y montañas. Una pequeña vegetación da pinceladas verdes a un paisaje donde predominan los azules y violetas del cielo y del agua. Un gran cuado de Alberto Rodrigo.
Un contraste extremo entre el desfiladero con colores térreos opacos pero riquísimos en matices ensombreados y la parte superior dominados por el bloque pétreo de una montaña excelsa. Riquísima composición pictórica llevada a cabo por el gran pintor Alberto Rodrigo.
Los trazos verticales de estas montañas han sido trazados con un vigor extraordinario. En la profundidad del desfiladero la sombra que se arrastra oculta entre una vegetación agobiada y arriba el bloque pétro de una montaña a plena luz del sol que nos muestra su grandeza y fortaleza. Enhorabuena al pintor Alberto Rodrigo.
Excelente composición pictórica de Alberto Rodrigo. El cuadro está dividido en dos partes. En la parte baja el agua y unas barcas que constrastan con la parte superior de la ciudad, con casas muy bien trazadas. En la parte superior, dominándolo todo, la catedral, cobijando al resto con su figura majestuosa. Enhorabuena para Alberto Rodrigo.
El pintor ha sabido escoger todos los matices pictóricos de luz ambiental que escenifiquen un paisaje veraniego. Entra la luz a raudales por un cielo sin fronteras. Ya entre los verdes del primer plano se destacan los amarillos y colores térreos que nos producen una sensación de calor veraniego. Excelente cuadro de Alberto Rodrigo
Extraordinaria instantánea acuarelística de Alberto Rodrigo. Este cuadro tiene una salvaje robustez digna de la paleta de los grandes pintores que unifican un conjunto abigarrado. No se puede pintar más en menos tiempo. Extraordinario cuadro de Alberto Rodrigo.
Las casas pintadas por Alberto Rodrigo se apiñan entre sí y se cobijan en un paisaje frío. El puente y la carretera les traen la ayuda sicológica necesaria del exterior ante la amenaza de un monte elevado insinuado solamente. Alberto Rodrigo pinta las casas y las infunde vida propia con toda profusión de detalles colorísticos. El verde primaveral de los árboles del primer plano sirve de contrapunto a todo el resto del cuadro. Enhorabuena para Alberto Rodrigo
Acuarela con rasgos impresionantes. Parece que hace frío. Cielo amenazante. Una excelente unificación de la paleta del pintor que extrae las casas entre un cielo alborotado. Enhorabuena para el pintor Alberto Rodrigo.
Una excelente composición pictórica sobre plano elevado. La torre del castillo del Infantado se eleva enérgicamente cobijando a su alrededor a las casas rurales que se apiñan protegiéndose en ella. Un cielo amenazante y una torre protectora. Excelente cuadro de Alberto Rodrigo.
El cielo se está oscureciendo. Va a llover. Los matorrales del primer plano y el terreno circundante van adquiriendo unas tonalidades acuosas cerca de la aparición de las primeras gotas. Apenas las tonalidades blancas de las casas y la torre de la iglesia pueden contener el presagio de la lluvia que viene por la izquierda del cuadro. Admirable composición de Alberto Rodrigo.
Alberto Rodrigo pinta con maestría singular las calles, las plazas, la cuestas, los callejones, todos los elementos fundamentales de los pueblos y lo hace con una gran delicadeza pictórica, como si esas plazas, esas calles, esas cuestas y esos callejones tuviesen una hermosura especial. Fíjense que también en esta plaza está vigilante la torre de la iglesia, elemento que sublima todo el paisaje. Admirable composición pictórica.
Las ruinas de un castillo que cuenta su vieja historia al agua que fluye lentamente. Un puente que atraviesa el paisaje y que nos comunica con el mundo de hoy y abarcándolo todo el cielo inquieto y cambiante. Admirable composición pictórica de Alberto Rodrigo.
Este cuadro tiene la particularidad de que el nivel del suelo pintado está por debajo del campo de visión del pintor. Es como si Alberto Rodrigo hubiera pintado este cuadro elevado sobre una plataforma, dando una especial importancia a la casa que se eleva majestuosa coronada por el cielo y unos árboles. Admirables detalles pictóricos.
En "Cerca del silo" el pintor Alberto Rodrigo ha conjugado muy bien la disposición de los elementos del cuadro. Sobresaliento del conjunto de casas en medio de las ruinas del castillo y de la iglesia se alza majestuoso un árbol que lleva el peso central de la configuración del color. Así se unen en el verde del árbol los azules y tornasoles del cielo y los grises de la carretera de la parte inferior del cuadro. Admirable disposición pictórica.
Las plazas son para Alberto Rodrigo como el corazón donde late la vida de los pueblos. Las casas cobran vida y siempre hay un detalle sicológico que él dispone sobreponiéndose a un entorno rural placentero. Es el campanario de la iglesia que se asoma en esta plaza. vigilante y protector. Admirable cuadro.
Una gran contraposición de valores cromáticos: las casas del molino en tonos rojos fuertes, la carretera con un verde prado insinuante en primer plano y al fondo sobre un altozano las ruinas de un castillo emblamético que cuenta su leyenda. El cielo lo uniformiza todo en un abrazo de nubes. Enhorabuena a Alberto Rodrigo por este cuadro extraordinario.
La composición de este cuadro está llena de aciertos con una riqueza cromática que llama la atención. Las primeras casas con tejados rojos llamativos contrastan con el verde del primer plano y el azul variopinto del cielo. Como insinuación el recodo de una carrretera y en la cima las ruinas de un castillo y una torre de iglesia lejana. No se podía insinuar más y mejor un paisaje extraordinario. Enhorabuena a Alberto Rodrigo.
Bajo la atenta mirada del pastor las ovejas se sienten igualmente protegidas por la presencia arquitectónica de la torre de la Iglesia que resalta en el cielo su arquitectura bienhechora. Este es el punto de vista estético del pintor Alberto Rodrigo en este excelente cuadro paisajístico.
Diálogo entre la espadaña del campanario y la laguna del pueblo. No hay ningún rincón que no lo haya soñado en pintura Alberto Rodrigo. Le deberían hacer un monumento por haber sabido asimilar todas las bellezas pictóricas ocultas en los paisajes de Villacalabuey. Enhorabuena al gran pintor.
Los ocres del pueblo y los azules del agua de la laguna. ¡Qué tema tan bonito para un cuadro! ¡Qué bien ha sabido escoger Alberto Roldrigo este paisaje que no se cansa uno de mirar constantemente. Es una obra de arte.
Otra casa iluminada que entabla un diálogo pictórico con el cielo. Otro cuadro extraordinario. Alberto Rodrigo es el pintor del diálogo secreto entre las casas iluminadas y el cielo que las envuelve. Enhorabuena.
Una casona con toda la historia de sus antiguas paredes y grandes ventanales. Las casas como las personas que las habitan tienen una vida y una historia que el pintor cuenta con pinceles y colores. Enhorabuena Alberto Rodrigo.
Un rincón rústico en una casita del pueblo. La paz se enseñorea del patio e invita al reposo. Un hombre lee mientras la luz hace filigranas con las plantas y los tiestos. Esta instantánea pasajera la ha captado el pintor Alberto Rodrigo con una habilidad extraordinaria.
Alberto Rodrigo es el pintor o fotógrafo de las cosas sencillas, donde sobresale el trabajo callado de las personas que llevan toda una vida de esfuerzo y dignidad. Una foto maestra.
Un cielo revuelto entre un rincón del pueblo que forma un conjunto armónico total. Un pintor que sabe unir la paleta del cielo y de la tierra. Un gran pintor.
La frescura del agua oculta en la que nadie se fija, pero que lleva la vida de los sueños por las huertas del pueblo. El pintor es un poeta que nos habla de una agua estancada y de un agua que corre por nuestras venas en forma de belleza. Enhorabuena para este pintor.
No hay rincón de cualquier corral que pase desapercibido a los ojos de este pintor exquisito. La luz principal en una puerta abierta. Alguien saldrá por esa puerta con su corona de sueños, esperanzas y tristezas. Enhorabuena.
Otro rincón del pueblo, imprevisto para los no iniciados, pero lleno de matices para los ojos de los pintores que saben apreciar temas interesantes. Tonos térreos entre casitas dominadas por el campanario de la iglesia. Elogios merecidos para este pintor extraordinario.
El pintor nos enseña a mirar a una simple enramada. Es el pintor que nos abre los ojos. ¡Cuánta belleza oculta en n poco de naturaleza! Bien por Alberto Rodrigo.
Este cuadro lleva implícito un diálogo paisajítico entre el cielo y una casa blanca que se eleva entre las demás cobrando un protagonismo extraordinario. Además hay un hombre que la mira como absorto. ¡Bien por el pintor! Ha sabido extraer este diálogo implícito con un arte esquisito.
La espadaña de una iglesia con sus campanas y nido de ciguëñas le sive al pintor Alberto Rodrigo para reflejar una sensación de paz y tranquilidad con su admirable paleta rica en cromatismos.
Este pintor maneja una acuarela rota que sabe entresacar del paisaje los elementos claves en la percepción de la belleza. En este cuadro se trata de un foco de luz que ilumina el paisaje desde el centro del cielo que se refleja admirablemente en las paredes de la casa situada en primer plano.
Este cuadro, de gran extensión, es de una variedad temática muy rica entre plazas y jardines del pueblo. El cielo muy rico en cromatismo lo unifica todo. Excelente pintura.
Los ojos de Alberto Rodrigo saben mirar, hallar la belleza escondida en la naturaleza y reflejarla en el lienzo, como en este cuadro de unas casas viejas, elevadas a categoría artística.
Un pajar que el pintor ha sabido elevar a categoría artística. Cualquier rincón por muy vulgar que sea, Alberto Rodrigo sabe darle el toque necesario para que su pintura sea excelente.
El rusticismo de este cuadro está muy bien reflejado. Me gusta mucho también la sensación atmosférica que el pintor sabe dar a todos sus cuadro.
Este cuadro me parece extraordinario porque tiene atmósfera y da una sensación de realidad. El pintor me parece muy experimentado.