ESE CRISTO DEL PERDÓN LASECANO
En mi juventud lasecana fui cargando con sus andas, no fue juventud profana ni quiero soñar andadas. Era el viernes por la tarde cuando vivimos calvario, era no pasar en balde sabiendo nuestro salario. Aquel Cristo del Perdón, que nos hizo ser mayores, hoy siento que fue razón para vivir los amores. Las andas sobre los hombres de amigos de la niñez, hoy que recuerdo los nombres no quisiera padecer. La procesión en silencio, eran tiempos de penumbras, nadie quiso ser ... (ver texto completo)
En mi juventud lasecana fui cargando con sus andas, no fue juventud profana ni quiero soñar andadas. Era el viernes por la tarde cuando vivimos calvario, era no pasar en balde sabiendo nuestro salario. Aquel Cristo del Perdón, que nos hizo ser mayores, hoy siento que fue razón para vivir los amores. Las andas sobre los hombres de amigos de la niñez, hoy que recuerdo los nombres no quisiera padecer. La procesión en silencio, eran tiempos de penumbras, nadie quiso ser ... (ver texto completo)