Mejores mensajes de ALDEANUEVA DE FIGUEROA:
Hola, soy de La Vellés. Yo siempre he oído decir que los de La Vellés son unos desalmados, porque fueron capaces de cambiar un cristo por un prado a una gente de Aldeanueva. Es algo que siempre se dice en La Vellés, pero nadie me sabe decir nada más.
Me gustaría saber que se dice de todo esto en Aldeanueva,
¿Puede ser verdad?
¿de que época podemos estar hablando? Yo lo asocio a la segunda mitad del siglo XIX, por allá por 1865 a 1875, por aquello de que pudiera estar relacionado con Gansinos.
Saludos ... (ver texto completo)
Tienes que contrastar más la información pues cuando se trata de situaciones que no ha vivido el narrador, sino que se las cuentan o otros se las cuentan al que se lo cuenta al narrador se puede faltar a la verdad e injuriar a personas que no te pueden contestar y si pudieran te podrían dar otro punto de vista. Hay que tener cuidado con algunos comentarios, incluso aunque fueran ciertos y aquella época que todos sabemos difícil e injusta lo que hay que hacer es olvidarla pues el resentimiento lo ... (ver texto completo)
¿Cuántos republicanos, generalmente armuñeses, hay allí enterrados?, ¿cientos, como dicen algunos?, ¿miles, como dicen otros?

Diego (Martín) Veloz (Diego Veloz – como se le conocía, o “Martinillo”, por su estatura, de ascendencia española, aunque nacido en Cuba, moriría en su domicilio de la Cll/ Gran Capitán, Salamanca, en 1.938, tras haberse alistado en el ejército y haber estado luchando en Cuba, tratando de impedir su independencia.
Logró numerosas condecoraciones en el ejército (mi madre ... (ver texto completo)
RECUERDO EL HORNO.

Aunque existía una panadería en el pueblo que (cosa curiosa) cuando ibas a buscar un pan no pagabas al contado sino que se llevaba un palo cuadrado, con un sello de la panadería, y cada pan que te daban le hacían, con el cuchillo, una muesca al palo. Al final, tantas muescas, tantos panes (a nadie se le ocurriría hacer más muescas de la cuenta, a no ser al panadero)

Pero en mi casa se amasaba cada semana, los viernes.
Así que el jueves por la tarde preguntaba entre los vecinos ... (ver texto completo)
Si en mi pueblo, ALDEANUEVA DE FIGUEROA, hubiera estado de alcalde el anterior, el “tío Viruta”, también la falange habría hecho de las suyas.
Pero se encontró con el “tío Antonio, el carnicero” que, cuando la falange llegaba al pueblo, los saludaba, al tiempo que les espetaba “yo también tengo pistola” y los sacaba a las afueras del pueblo, para que se fueran por donde habían venido.

Es real esta historia.
El “tío Nicomedes, el sastre” (padre del “tío Rosendo, el sastre, y abuelo de Vicente ... (ver texto completo)
El marranero, el cabrero, el borriquero, el boyero, el barbero/peluquero, el pastor, el esquilador (de ovejas y de burros), el capador, el herrador, el herrero, el molinero… eran puestos laborales que siempre estaban cubiertos y, para comer, daban.

En mi casa había cuatro cerdos de cría que, todos los días, los llevábamos al camino e iban, con el marranero, al campo; dos bueyes armuñeses y dos vacas (para trabajar, para parir y para dar leche) y que tenían (en la temporada de pastos) la Huerta ... (ver texto completo)
Además las personas que citas en tus mensajes sean como fueren o actuarán como actuasen, muchas han fallecido y no pueden defenderse.
Además los mutilados de guerra cobraban una paga por eso precisamente y nosotros no sabemos el sufrimiento que pueda ser tener metralla al lado del corazón o tener amputado algún dedo o dañada alguna pierna. De igual modo citas a gente que no cobraba esa pensión y tuvieron hijos que fallecieron en el frente en edad joven y trabajadores dejando a familias huérfanas ... (ver texto completo)
Lo que he expuesto en estos posts son la biografía de tantos y tantos que ahora rondan los setenta y para arriba.
Era un esfuerzo físico, sobre todo para los que no estábamos zurrados en las tareas del campo.
Cuando veo, ahora, a los labradores, con el volante en sus maquinarias, la nevera al lado, la música ambiente, sin pasar frío ni calor, cómo aran, siembran, abonan, cosechan, empacan, cómo suben las alpacas,...
No añoro aquellos tiempos, sólo los recuerdo
Las eras, circunvalando el pueblo, son de propiedad comunal. Alguna había privada, como la era de Las Alambres, de las que una tercera parte era propiedad nuestra, casi en la mitad del pueblo, pero que esa ventaja de cercanía conllevaba la desventaja de la ausencia de aire para poder aventar o “limpiar”.
Antes de comenzar el verano, en domingo, a la salida de la misa, se sorteaban las “suertes” que eran de distinta superficie según las huebras o fanegas que se poseían. No podía ser la misma para ... (ver texto completo)
LA SIEGA

Uno de los secretos mejor guardados, en mi pueblo, era en cuánto se habían contratado los segadores. Nadie lo decía, no siendo que quedara como un “primo” por haberlos contratado más caros que los demás.
Pero una vez que yo estaba presente en el trato, y me enteré, se lo contaba a la gente. Maldita la gracia que le hizo a mi padre, pero no me castigó. Debió de considerarse co-responsable, por haber permitido que mi ingenuidad estuviera presente en una cosa tan seria.

Se contrataba ... (ver texto completo)
Mi padre era de aldea nueva manolo rrebulle
Una familia numerosa, pobre, pero muy sana, con una ética de campeonato y muy trabajadora. Yo también la recuerdo. Saludos de Sito, el de Geño y Geña.
Mucho templo para tan pocos habitantes que tiene el pueblo.
Tengo el remordimiento de conciencia siempre a flor de piel por no haber grabado todas las peripecias de mi padre durante la guerra.
Desde el 18 de Julio del 36 hasta el 1 de Abril del 39.
Casi tres años con el fusil en la mano, menos por la noche, en que hacía “trabajos especiales”, es decir, era un “hijo de la noche”, un espía voluntario que se acercaba a las trincheras enemigas o entraba en algún pueblo, siempre buscando información sobre “los rojos”.
También, tras las refriegas bélicas, se ... (ver texto completo)
LOS CURAS DE MI PUEBLO.

Como nací en el 44 han sido varios los curas que he conocido, naturalmente todos ellos en y con el nacional-catolicismo y la interpretación de nuestra guerra “incivil” como una Cruzada contra el marxismo-ateísmo-comunismo, y todos, en la misa rezando “pro duce nostro Francisco”, el salvador de España de las garras enemigas y que era el que, luego, pagaba, eximía de impuestos, de sumisión a la justicia ordinaria, exención del servicio militar,… auténticos guardianes celosos ... (ver texto completo)
RECUERDO

Recuerdo aquellos años, pero no con nostalgia. Ésta siempre es un engaño al seleccionar los recuerdos y edulcorarlos.
Eran los, así llamados por los vencedores, “25 años de paz”.
Una paz impuesta, no elegida ni asimilada, no sólo por los vencidos republicanos sino también por los que, asomados a la Universidad, veíamos que nos tapaban las fronteras para poder contrastar nuestra “paz” con la “paz de los demócratas europeos”.
Afirmar que hay paz porque ya no hay enemigos es un sarcasmo.
Es verdad que muchos ya no estaban, porque estaban muertos pero otros muchos estaban exiliados (gracias México, amigo) y otros escondidos tras una doble pared en el salón de la casa y cuya entrada era la puerta del aparador, por la que, por las noches, quizá saliera a charlas con la familia, a estirar las piernas, a comer o a evacuar.
Se tenía miedo, mucho miedo, al paredón si eran descubiertos.
Se vigilaba qué cantidad de alimentos compraba la madre en la tienda cuando se suponía que su marido, cobarde y traidor, había huido al extranjero.
¿Y el tabaco?
¿Cómo podía la esposa hacerse con la pota de tabaco para el enclaustrado en la guarida?
Era la prueba de que “el tabaco no engaña”.
Años y años encerrados como ratas en sus ratoneras.

Esa Paz… (La Codorniz, una vez más, sería requisada de los kioscos, multada y cerrada temporalmente por aparecer en su portada PAZ y en su contraportada CIENCIA). Y como era “la revista más audaz para el lector más inteligente”, todos leían PACIENCIA. Eso era la PAZ, PACIENCIA.

El miedo era el que guardaba la viña.

El lema era: “nos tienen envidia”, por eso no quieren contacto con nosotros ni nos dejan entrar en las instituciones europeas e internacionales.

Yo, naturalmente, como la mayoría de los españoles, no nos enteramos de la 2ª Guerra Mundial, por lo tanto tampoco del Plan Marshall.
Lo que sí se nos remachaba era que Franco nos había salvado de la guerra (como antes nos había salvado del marxismo-leninismo-comunismo republicano)

Había guerras por todo el mundo, menos en España, gracias a Franco, a quien deberíamos estar sumamente agradecidos. Por eso éramos la envidia de todos y era esa envidia la que nos cerraba las puertas a las Instituciones Superiores.

“Franco, Caudillo de España por la gracia de Dios”

En mi pueblo no había prensa, ni radio, ni (menos) televisión.
Funcionaba Radio Macuto que, como se sabe, nunca es información neutra, sino coloreada del interesado de esa noticia.
El Sr. Antonio, el carnicero, tenía una radio y nos dejaba oírla, muchas noches, sobre todo para oír cantar a Evaristo, sobrino-primo de mi tía. A veces, también, oíamos “el parte”, cuya información, la creyéramos o no, no teníamos instrumentos de contrastación.
Así que “así debía de ser” la realidad exterior como nos la contaban desde el interior.

¿Cómo iba a criticarse a los amigos del Régimen Fascista aunque se le denominase como Movimiento Nacional?

La guerra civil, nuestra guerra civil, no fue tanto una guerra civil como un golpe de estado, convertido en “Cruzada”, predicada y bendecida por la Iglesia Católica, Apostólica y, sobre todo y también, Romana.
Y, con “la ayuda de Dios”, pudo celebrase el 1 de Abril el “Día de la Victoria” y se enterró el régimen republicano, votado por la mayoría de los españoles, con las manos ardiendo de la iglesia, de tanto hacer palmas.

Así, desapareció la Información y se instaló la Propaganda y la Publicidad.

Ya no había más que un color, el azul, el de “los buenos”.

Ir a misa los Domingos y Fiestas de Guardar, confesar y comulgar al menos una vez al año, y por Pascua Florida, era la “conditio sine qua non” para no levantar sospecha de ateo (por lo tanto republicano y comunista, rojo “malo” y enemigo de España, de la Paz y de la Prosperidad)

Y RECUERDO…

Recuerdo mi vestimenta diaria, ese pantalón corto, de pana, que hacía Casimiro, el sastre, o nuestra propia madre, y que se nos descosía continuamente al jugar a “guardias y ladrones”, con una raja adelante, para mear, y otra mayor atrás para….
Los calzoncillos llegarían mucho después.

Por supuesto, ninguna niña con pantalones, sería calificada de “machuna” o “machorra”, nada femenina, por lo que, (traviesos) aprovechábamos para verles las bragas (ellas sí las llevaban).

Estrenar ropa era algo raro.
Todo iba pasando del mayor al siguiente y al siguiente, desde pantalones, camisa, zapatos,…

Recuerdo, aún, la poesía:

“Me cago en diez y en rediez
Cuánto me quiere mi madre
Que me ha hecho una camisa nueva
De una vieja de mi padre”.

Ni moda infantil ni juvenil.
Las madres, todas, eran multifuncionales (hacía todo, de todo, y lo hacían, generalmente, bien).

Y me RECUERDO…

Me recuerdo de trillique, con 4 ó 5 años, a rachisol.
Hoy sería explotación infantil y los Servicios Sociales te quitarían al niño.
Entonces el niño ya era mano de obra. ... (ver texto completo)