SANTIBAÑEZ DE ARIENZA: -La ciudad ibérica de Urbicua, llamada luego Legio...

Habra que ir a destapar.

Cuando quieras nos ponemos con el pico y la pala.

Tu coge el pico.

-La ciudad ibérica de Urbicua, llamada luego Legio Super Urbicum, junto a la Vega de Arienza o de Orbigo-

Comenzando a seguir el curso del Orbigo, desde su origen, en dirección al Oriente, al unírsele el afluente segundo, o río tributario, que es el que baja de Sosas del Cumbral y Garueña, en frente al espacio que media entre éste y el tercer afluente formado por las aguas de Salce, Arienza, Manzaneda y Cornombre, a la parte opuesta, o sea a la ribera derecha del Orbigo, en una larga y espaciosa llanura, que pertenece a los pueblos de Vega y Santibáñez de Arienza, se descubren los indicados restos, que consisten en montecitos de piedras, cubiertos la mayor parte de césped, otros labrados por encima para sembrar centeno, que se cría allí con abundancia. Es notable lo bien que se conocen todavía las calles, especialmente la mayor o principal que atraviesa la población de E. a O. en toda su longitud. No se ven por encima restos de columnas ni de edificios grandiosos; pero no es difícil se hallasen monedas como antiguamente se han hallado, si se hiciesen excavaciones.
¿Pero qué ciudad será ésta? ¿Pertenecerá a los antiguos moradores, celtas o íberos u otros aborígenes, o al imperio romano? No faltan razones para conjeturar uno y otro. Las apuntaré con la brevedad posible, esperando que V., mi buen amigo, de una sentencia definitiva sobre ello.

No parece improbable, que sea la antigua Urbicua, de que habla Tito Livio, en el libro X de la Década IV, al decir que Fulvio Flaco y Posttumio, después de tomar los castillos y fortalezas de los Vacceos, sitiaron a la antiquísima ciudad de Urbicua. Y aunque la supone próxima a los Celtíberos, sabemos que Livio no estaba tan fuerte en geografía como en historia, en la cual, sin embargo, comete también bastantes inexactitudes. Conviene el nombre de la ciudad con el del río Orbigo (Úrbicus), del cual recibiría el nombre, o el río de ella; y se halla casi en su origen, lo que da mucha fuerza a esta conjetura. Y el nombre del pueblo a que hoy pertenece la mayor parte del área de esta población no desmiente las razones que militan en favor suyo, antes bien las corrobora: llámase Vega, y fácilmente se comprende cómo pudo desfigurarse el nombre de Urbicua en Urbecua, Uecua, Uegua y Uega.

Favorece y da más probabilidad a lo expuesto, de que fuese ciudad de los antiguos habitantes de la península, el hallarse al NE. de ella, o sea en el ángulo que forma el tercer afluente con el río Orbigo, al N. de éste y a la parte oriental del afluente, en un montecito de roca bañado por los dos ríos, y como formado por Dios a propósito, un castillo, sin duda alguna de la época de los romanos Es indudablemente de los mejor conservados de aquellos tiempos en nuestra nación, aunque por dentro tiene obras de época muy posterior; y está allí como dominando a la ciudad, no defendiéndola. Recuérdanos el proceder de los romanos con los vencidos Astures, cuando les obligaron a vivir en las poblaciones del llano, y formaron una serie de castillos para sujetarlos, desde el límite oriental de los Cántabros hasta lo último del territorio de Astúrica. Y parece que éste es el último; pues descubriéndose a la parte oriental
Por lo que toca a la población, el sitio en donde está, hoy se llama La Puebla. Por la parte del S., entre el caserío y la sierra hay tres zanjas anchas profundas y paralelas: más hacia el N. y el río se descubren varios ordenes de cimientos y escombros de casas pequeñas y bien ordenadas, que tendrían cada una 4 m. de largo y algo menos de ancho: se distinguen hoy perfectamente, por los montecitos que forman, más de cuarenta.

Las zanjas dicen que fueron también calles (son todas tres rectas), y tienen de largo, en lo que se conserva bien, la que menos 100 m., y la mayor 1 km. próximamente.

No debo omitir que a una cueva que hay en la ladera de la sierra, próxima a donde la vía romana desciende rápidamente a esta población mencionada, la llaman hoy día poza o cueva de los Griegos. Ignórase cual pudo ser el origen de ese nombre; pero el origen de la cueva parece indudable, así como el de otras muchas, que fueron minas explotadas en la antigüedad.

No obstante lo dicho, parece más probable que fuese ciudad romana o de las mandadas fundar por los romanos cuando bajaron los astures de sus montañas; o bien acaso de los antiguos habitantes, pero utilizada y reformada después por los conquistadores para seguridad del Imperio. El grandioso castillo mencionado, que según algunos se comunicaba por bajo del río con la ciudad, da a entender que aquello sirvió de punto estratégico al ejército de los Césares. Si se comunicaba o no con la población por bajo de tierra, ni lo afirmaré ni negaré; pero me parece más seguro que la sima o camino subterráneo que se descubre, aunque muy obstruido, en el ángulo más saliente del castillo hacia el Orbigo, solo era una galería que bajaba hasta el nivel del cauce del río, para proveerse de agua en caso de sitio. Ni se nota pudiera ser alguna salida secreta o medio de huir en casos extremos, como se ve en otros castillos, y he notado en los de San Esteban de Gormaz, en Langa y en Zuzones, donde, aunque ni rastro de castillo se descubre en él, se ve que lo tuvo, por una galería perfectamente conservada que desde el alto más prominente del pueblo, va a salir junto al río Duero, como observé el año pasado hallándome todavía en el colegio de La Vid.

Dan más fuerza a esta opinión los restos de minas explotadas en aquellas comarcas, que debieron ser parte de las que, según Plinio, daban 20.000 talentos anuales a Roma.

Entre los monumentos romanos descuella una vía, que se conserva casi toda en buen estado, y sirve de camino a los pueblos por donde pasa. Este sigue toda la margen derecha del Orbigo, desde su origen (según el mapa de la Cantabria hecho por V., que parece hacer al Orbigo el río más meridional de los del partido de Murias de Paredes, cuando otros creen que es el primer afluente que sale de junto a Murias, o sea del puerto de la Magdalena), sigue costeando toda aquella sierra por la mitad de su altura, desde el centro o parte superior de la cordillera del Cebrero, hasta cerca de esta población, y atraviesa los términos de los pueblos de Fasgar, Vegapujín, Posada, Barrio de la Puente, Cirujales, y últimamente Vega. Al llegar a éste, toma más altura en la sierra, sin duda para unirse al que debía venir directamente de Astorga; o porque, saliendo juntos de la ciudad, a la mitad de la altura de la cordillera, se separaban costeando el de que tratamos, toda su ladera del N. hasta introducirse, cruzando el Cebrero, en el Bierzo por su parte superior, y declive meridional de los montes llamados las Cortinas, dirigiéndose de allí a Lugo u otras ciudades de Galicia.
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
Cuanto sabes, ya me cansaba de leer serà verdad pero ¿donde està el tesoro? un coche de oro y una gallina con no se cuantos pollos, hay que encontrarlo.
Hola Tirso,

Esto es de Tirso López Bardón ¿no? Unas preguntas... ¿Cuándo
empezaron a llamar Omaña a esta rama del Órbigo? Yo había oido que el
castillo de Benar era medieval, y no de los tiempos de los
romanos. ¿tienes alguna idea en qué se basan unos y otros para
determinar el origen? ¿han hecho alguna excavación reciente?

Me parece increíble que casi nadie se preocupe del patrimonio
histórico de la comarca, ni para investigar ni para restaurarlo. Es ... (ver texto completo)
El prestigioso y brillante historiador y arqueólogo agustino Padre César Morán, natural de Rosales, ha estudiado y trabajado a fondo y sobre el terreno el tema de la ciudad de Urbicua situándola en la explanada del paraje de "La Puebla".