San Juan "Figueiro", así llamado porque su festividad se celebra el 29 de agosto, cuando maduran los "figos" (higos).
Nada se sabe de sus orígenes porque su historia no está escrita, pero, según se ha ido transmitiendo oralmente de generación en generación, el pueblo tuvo otro asentamiento.
Sobrias casas de piedra y pizarra, adaptadas a la pendiente del terreno, que cuentan dentro de su perímetro con hórreo, vivienda principal, pajar, era y alguna higuera.