Hace unos dos días o así, me levanté temprano y el olor del aire me hizo sentir que no se porqué extraña razón, empezaba a amar el
otoño, época del año que siempre me entristecía, y ahora me hace sentir bien, me agrada. Y después de muy poco pensar me dí cuenta que la razón de todo esto, de que el comienzo del otoño me guste, no es otra cosa que mi mente, mi subconsciente, lo más profundo de mi, evoca unos sentimientos que descubrí, que disfruté y que me llevaron a acariciar las estrellas, a sentir
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