Por San Polvorón Bendito que diría PC ¿Cómo es posible que alguien que se hace llamar nada más y nada menos que KUBALA, respire de tal manera? Temo qye fué cosa de VISPERAS JEJE.
VÍSPERAS ES INOCENTE.
Excmo. Sr. REALITO. Mucho errores cometí en mi “proceso vital”, pero el de KUBALA (Kubalina) ha sido la desgracia más grande en la que yo haya podido participar. Ya conté que, una vez bautizado, lo dejamos en manos de ese gran señor (más madridista que Antídoto) al que llamábamos “el Tío Juan Jiguera”. Es, más o menos, como dejar a un niño de 5 años en manos de un “ideólogo tendencioso”. Errare humanun est. Pido humildemente disculpa por semejante metedura de pata. En otro orden de cosas, he de decir:
Mi querido primo Antídoto 50, en cuestiones futboleras, es como es. Su televisor es en blanco y negro- salón de abajo- con muchas rayas. El Sr. Bernabéu (que el Señor lo tenga donde por ordenanza le corresponda) dando órdenes a- como VE., bien dice- unos y a otros. ¡Qué hermoso era aquello! ¡Cuántos cadáveres deportivos en semejante césped!
Dese cuenta, Excmo. Sr., que el héroe mítico del Sr. Antídoto, era un tal Benito, cuyo mayor gloria consistía en retirar del fútbol a los delanteros contrarios (véase un tal Bustillo) y, por lo que- a lo que se ve- debió de recibir la medalla al mérito deportivo. Nuestro héroe es un tal Messi (que, obviamente, en pretéritos tiempos, no hubiese vestido la zamarra azul y grana)
En realidad, en el televisor del Sr, Antídoto50 y sus adláteres, el Sr. Messi, hubiese sido expulsado nada más salir al campo, por el doloso delito de no dar la talla física; el Sr. Piqué, expulsado, por cortar un balón al “Príncipe del cuento”, y Pedro, el pobre, por correr un poco más de la cuenta. Por eso, Excmo. Sr. estas discusiones, aunque bizantinas, nos llevan a aquellas de nuestros mozos tiempos, donde el antagonismo enriquecía los espíritus combativos de la juventud, pero, donde, efectivamente, casi siempre ganaban los mismos “caballeros del honor”.
Excmo. Sr.,: A VE., y a este humilde secretario, las ideas u sentimientos del Sr. Laporta, nos traen al pairo. Aunque sabemos del daño que nos hace. Nos duele, efectivamente, que se instrumentalice el Club de nuestros amores, al servicio de intereses bastardos o espurios. Pero, nosotros nacimos culés.
En otro orden de cosas, como VE., y mi querido primo Antídoto50, comprenderá, no nos van a dar clases de españolidad, cuatro individuos sentados en un palco, a quienes hemos enterrado a muchos compañeros envueltos en la enseña nacional (rojo y gualda) Que, dicho sea de paso, no debería instrumentalizarse tampoco al servicio de intereses poco diáfanos.
De la cosa esa de la Alianza de civilizaciones y educación para la ciudadanía ya hablaremos otro día. No me sale de los “órganos genitales”, aliarme con un tío que dice que a la mujer “adúltera” hay que lapidarla (meterla en un hoyo en el suelo y matarla a pedradas) como en el siglo I antes de Cristo.
Excmo. Sr.: Mi querido primo Antídoto50, es un tipo cojonudo. ¡Perdónele los excesos! Sólo que, para él, incluso la primavera es blanca. También, comete excesos, porque hace uso del nepotismo que le da la cercanía con Monseñor Calambú, del que, a cada pecado que comete, recibe la correspondiente bendición apostólica.
Un abrazo para todos y…disfrutemos- los Culés- que ya vendrán tiempos peores. Lo dicho. PC
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