Aún no se sabe a ciencia cierta si habrá un espectáculo que otro; como las normas de sucede unas a otras... como la de hoy: puede haber música pero sin baile " cercano"; sin poder rememorar aquello cuando iba a pedir baile, y te contestaban cuando no querían bailar contigo... o tal vez fuera verdad: estoy..... SALUDOS.
Hablando del maestro D. Pedro. FELICIDADES hoy 29 de junio a todos los Pedros y Pablos. Ello nos hace recordar el cartón de tabaco "Ducados", que en particular, e regalábamos por su santo; sabiendo que era un gran aficionado de ello. No pongamos ahora el grito en el celo porque el maestro fumaba en escuela -en clase se dice ahora- porque también se fumaba en los hospitales y de ello si que doy fé. Ahora que ni nos ni nos lle nadie. Recordamos que una mañana... se abstenga de leer al que no le interese;...
Llega la noche y todo está en calma, y no es un accidente gramatical, es una pura realidad; viene la abuela con la sopa de tomate “cardá”, que alrededor del chozo había que tomar y cerca de allí, los camastros donde había que dormir. No obstante, el abuelo guardaba con impaciencia sus peces fritos (era un gran cazador y pescador) o sus culebras o erizos capturado y preparado por la tarde. Nos decía que la carne de erizo era igual que la del cerdo. Así que la cocina de Tailandia …que si que iremos...
Pero a lo que íbamos: Nosotros, aparte de aprender los ríos con sonido monocorde pero con ganas; tan sólo aspirábamos ir de vacaciones al chozo de los abuelos, donde el abuelo era guarda de “La Hoja” y ver “La era”; pongamos que fuera la dehesa de “Los Hornos” donde nuestra sombrilla era un “sombrajo” levantado con cuatro palos y cubierto de retamas; donde “la marea” era un ligero viento desde Poniente, que se aprovechaba para limpiar “la parva”; y si por la noche se hacía más potente, decíamos que...
Nos llega las vacaciones y parece que nos hace sonar: mar, playa… cuando el mar hace más bien o relativamente poco: lugar de muerte, porque así nos lo enseñaba D. Pedro el maestro, es un ejemplo; ya que nos decía que el río Miño, iba a morir al mar por Tuy, igualmente los ríos Duero y Tajo en Oporto y Lisboa respectivamente; eso sí… lo hacíamos cantando como si no hubiese pena y a viva voz. Sabíamos muy bien que visitar en nuestras vacaciones el mar por aquellos entonces, era “un sueño, un misterio...
Hablando del maestro D. Pedro. FELICIDADES hoy 29 de junio a todos los Pedros y Pablos. Ello nos hace recordar el cartón de tabaco "Ducados", que en particular, e regalábamos por su santo; sabiendo que era un gran aficionado de ello. No pongamos ahora el grito en el celo porque el maestro fumaba en escuela -en clase se dice ahora- porque también se fumaba en los hospitales y de ello si que doy fé. Ahora que ni nos ni nos lle nadie. Recordamos que una mañana... se abstenga de leer al que no le interese;...
Llega la noche y todo está en calma, y no es un accidente gramatical, es una pura realidad; viene la abuela con la sopa de tomate “cardá”, que alrededor del chozo había que tomar y cerca de allí, los camastros donde había que dormir. No obstante, el abuelo guardaba con impaciencia sus peces fritos (era un gran cazador y pescador) o sus culebras o erizos capturado y preparado por la tarde. Nos decía que la carne de erizo era igual que la del cerdo. Así que la cocina de Tailandia …que si que iremos...
Pero a lo que íbamos: Nosotros, aparte de aprender los ríos con sonido monocorde pero con ganas; tan sólo aspirábamos ir de vacaciones al chozo de los abuelos, donde el abuelo era guarda de “La Hoja” y ver “La era”; pongamos que fuera la dehesa de “Los Hornos” donde nuestra sombrilla era un “sombrajo” levantado con cuatro palos y cubierto de retamas; donde “la marea” era un ligero viento desde Poniente, que se aprovechaba para limpiar “la parva”; y si por la noche se hacía más potente, decíamos que...
Nos llega las vacaciones y parece que nos hace sonar: mar, playa… cuando el mar hace más bien o relativamente poco: lugar de muerte, porque así nos lo enseñaba D. Pedro el maestro, es un ejemplo; ya que nos decía que el río Miño, iba a morir al mar por Tuy, igualmente los ríos Duero y Tajo en Oporto y Lisboa respectivamente; eso sí… lo hacíamos cantando como si no hubiese pena y a viva voz. Sabíamos muy bien que visitar en nuestras vacaciones el mar por aquellos entonces, era “un sueño, un misterio...