RECORDAR EL PASADO
Te pueden llamar ignorante, me pueden llamar retorcido, es posible que surja el pedante que hasta quiera meterse conmigo. Conociendo las grandes verdades, escuchando chillar a los grillos, no queriendo vivir falsedades, y leyendo a los hombres sencillos. Hoy los tiempos se vuelven engaños, cada humano se ve sorprendido, es posible que borraron los daños y dejaran morir los heridos. Mi memoria me grita con fuerza, entre sones que son aburridos, si el mañana o presente se esfuerza los obreros es posible que no estén vencidos. Entre pobres que son insolentes, corren vientos de grandes perfiles, van gritando sin verse conscientes de lo triste de algunos fusiles. Esperando que cambie su rumbo hacen grande las muchas mentiras, muchas horas se llenan de absurdo con sus vidas que son como tiras. Recordando el pasado presiento los derechos que serán perdidos, es posible que sobre el aliento entre gentes con tiempos fingidos. El mañana se marchó ocultando las miserias del pueblo oprimido, gente culta que estuvo soñando el poder caminar siempre erguido. En las sendas que fuimos pisando con los sueños buscando destinos, nos quedaron las huellas gritando de personas buscando sus signos. Recordar el pasado me crece, sin mentiras cambiando de siglo, mientras pienso que así prevalece lo que fue la cultura sigilo. El mañana me viene importando cuando siento gritar a chiquillos, que nacieron con muchos derechos y se pueden quedar como grillos. Es posible que el viento nos marque el sentido de no ser absurdo, y otro tiempo de nuevo te embarque sin tener que pisar medio mundo. Los bribones que vienen gritando es posible que sueñen millones, sus palabras nos vendrán dejando lo más triste anulando razones. El mañana es camino al futuro, donde buscan sillones y engaños, todo puede volverse más duro con los pasos que buscan los daños. Si los años nos dieron lecciones, si los gritos no sirven de nada, que tu mente buscando razones no se sienta por siempre engañada. G X Cantalapiedra.
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