VIVIMOS BAJO EL TERROR DE LA GUERRA Y SUS BOMBAS.
Estamos sufriendo amenazas diariamente, Putin nos habla de sus bombas nucleares, y todos los seres humanos del mundo entero, temblamos, sabemos que los dictadores asesinos a veces no los frena nada, ni tienen nadie al lado para hacerles los cargos, ellos se sienten como por encima del mal y del bien, Y si alguien les intenta frenar, se vuelven medio locos, sus soluciones son tan nefastas que temblamos si lo pensamos demasiado. Esta guerra de Ucrania le ha dado alas, para seguir intentando dominar el mundo. Antiguamente hubo guerras que ni las gentes se enteraban de que existían, era en rincones del mundo que solo los habitantes de otros países limítrofes conocían, Ahora los medios de comunicación nos lo cuentan al minuto, y me temo que, si existiera un choque frontal entre países con bombas nucleares, no lo contaríamos nadie. Hace años este tema lo hablamos, Jiménez del Oso y él que aquí escribe, a los tres años nos volvimos a ver, y me reconoció al momento, diciéndome, lo que me contaste lo he pensado muchas veces, tienes mucha razón, quisiera que eso no ocurra jamás, pero las armas las carga el diablo. Nos quedamos los dos pensando, era un hombre con ideas muy avanzadas, al despedirse de mí, me comentó. “Si eso que hemos hablado los dos surgiera, no quedaría nadie en este planeta con vida, o como me dijiste hace tres años, alguna isla perdida pudiera seguir adelante, con la vida humana, pero seria empezar de cero su paso por este planeta”. Nos dimos la mano y la despedida fue muy normal, los dos pensábamos lo mismo, pero ninguno deseaba que se cumpliera esa tan trágica actitud del dictador que fuera, Las bombas no son cribas, y los efectos sobre la corteza terrestre son demoledores. Ojalá a Putin y otros dictadores del momento, les hagan reflexionar y así evitaremos el final de la supervivencia de la vida humana sobre el planeta Tierra.
G X Cantalapiedra. ... (ver texto completo)
Estamos sufriendo amenazas diariamente, Putin nos habla de sus bombas nucleares, y todos los seres humanos del mundo entero, temblamos, sabemos que los dictadores asesinos a veces no los frena nada, ni tienen nadie al lado para hacerles los cargos, ellos se sienten como por encima del mal y del bien, Y si alguien les intenta frenar, se vuelven medio locos, sus soluciones son tan nefastas que temblamos si lo pensamos demasiado. Esta guerra de Ucrania le ha dado alas, para seguir intentando dominar el mundo. Antiguamente hubo guerras que ni las gentes se enteraban de que existían, era en rincones del mundo que solo los habitantes de otros países limítrofes conocían, Ahora los medios de comunicación nos lo cuentan al minuto, y me temo que, si existiera un choque frontal entre países con bombas nucleares, no lo contaríamos nadie. Hace años este tema lo hablamos, Jiménez del Oso y él que aquí escribe, a los tres años nos volvimos a ver, y me reconoció al momento, diciéndome, lo que me contaste lo he pensado muchas veces, tienes mucha razón, quisiera que eso no ocurra jamás, pero las armas las carga el diablo. Nos quedamos los dos pensando, era un hombre con ideas muy avanzadas, al despedirse de mí, me comentó. “Si eso que hemos hablado los dos surgiera, no quedaría nadie en este planeta con vida, o como me dijiste hace tres años, alguna isla perdida pudiera seguir adelante, con la vida humana, pero seria empezar de cero su paso por este planeta”. Nos dimos la mano y la despedida fue muy normal, los dos pensábamos lo mismo, pero ninguno deseaba que se cumpliera esa tan trágica actitud del dictador que fuera, Las bombas no son cribas, y los efectos sobre la corteza terrestre son demoledores. Ojalá a Putin y otros dictadores del momento, les hagan reflexionar y así evitaremos el final de la supervivencia de la vida humana sobre el planeta Tierra.
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