Ver el foro de TORREMOCHA DE AYLLON

HABLANDO CON EL DEMONIO,
Se pasaron muchos años, de poco valen sorpresas, el hombre busco los daños cuando las dudas regresan. Aquella noche de agosto con el coche circulando, no recuerda haber pasado por Peñalba ni rodando. Desde Los Altos de Ayllón su coche se fue volando, sin saber su situación en San Esteban fue despertando. No sabe cómo llegó, pero su mente pensando, el Duero le despertó y se quedó tiritando. Ha vuelto hacer el camino, mirando bien los rellanos, no sabe cómo su signo no termino ... (ver texto completo)
MISTERIO SIN RESOLVER AQUELLA NOCHE
Cuando surgen los problemas en las noches de verano, piensas en buenos esquemas sin dejar de ser humano. Era por el mes de agosto de mil novecientos ochenta y uno, con el sudor en el rostro hubo viaje muy nocturno. A las tres de la mañana como flotando sin humo, el coche medio volando tuvo un vuelo inoportuno. Un martes de madrugada en un tiempo de misterios, el coche nunca rodaba ni pensaba en cementerios. Desde Los Altos de Ayllón sin pensar en la tardanza, ... (ver texto completo)
LAS NOCHES QUE SON MISTERIOS
Aquella noche de brisas por los caminos del Duero, se nublaron ciertas prisas sin ser un rumbo embustero. Desde Los Altos de Ayllón de camino a San Esteban, se pierde mucha razón y más si cunden las nieblas. Cuando las noches se funden en misterios tenebrosos, muchas luces se confunden en momentos horrorosos. Sombras que siguen bailando entre curvas peligrosas, el tiempo sigue marcando ciertas luces vanidosas. Noches de negros misterios por caminos cautelosos, donde ... (ver texto completo)
PEÑALBA DE SAN ESTEBAN ERA PARTE DEL CAMINO
Hay misterios en la vida que nadie puede explicar,
entre las cosas sencillas que puede darte un lugar.
Las brisas de la mañana corren por muchas laderas,
y hay sonidos de campanas que alegran las primaveras.
Peñalba luces y sombras de un pasado de leyendas,
con álamos que te asombran entre sus temidas nieblas.
El Duero sigue orgulloso sin pisar esa vereda
donde los fríos se crecen en sus grandes arboledas.
Corren los vientos del norte en sus campos ... (ver texto completo)
AQUELLA NOCHE DE AGOSTO DE 1979,
Aquella noche de agosto, era para aquel hombre una pesadilla, de la que nunca se pudo librar, más aquel día del mes de septiembre, del año 2017, sintió algo en su cerebro, que hasta entonces nunca había sentido, fue en una sala de hospital, del Gregorio Marañón, de Madrid, donde un hombre de su misma edad, comento lo que le había pasado en el mes de agosto, de 1979, por las tierras de Soria, mejor dicho por Los Altos de Ayllón. En aquel momento tembló, aquel hombre ... (ver texto completo)