Ante los comentarios, sobre la devoción a nuestra Vigen de la Piedad, de marino,
tope y popis; debo reconocer un poco apenado que, es una triste realidad. Estamos
viviendo un tiempo que, no tiene nada que ver, con las
costumbres de no hace mu
-chos años. Poco a poco, con tanta máquina, robots, la informática avanzando a pa
-sos desmesuradamente largos; hace que sin darnos cuenta, nos estemos deshumani
-zando y perdiendo las viejas y sencillas costumbres. A falta de maquinaria, los
trabajos
... (ver texto completo)