
Una de las cosas
costumbres peculiares es la forma de hablar, ni es "inculto", ni "burro", pero sorprende por la utilización de léxico, en ocasiones
olvidado, pero continuamente empleado desde nuestros orígenes ancestrales. Que se haga distinción en los frutales entre masculino y femenino: que se diga "la
nogal", que se diga manzanal en lugar del inculto
urbano "
manzano". Que en lugar de "ciruelo", se diga en el
pueblo cirujal y así sucesivamente. Cientos de palabras usadas habitualmente, no se escuchan fuera del
entorno, aunque la
gente de los alrededores, las entiende perfectamente.
Recientemente se ha realizado la
Semana de la Pluma en La
Vecilla, y sin restarle protagonismo, decir al respecto que esa exclusividad de los gallos de pluma en la zona del Curueño (La Candana, Sopeña, Campohermoso..), no es cierta. Que se informen bien, pues por ejemplo en
Cerecedo siempre hubo también gallos de pluma para la
pesca, y desde mediados del
siglo pasado Aureliano vendía pluma
india a los franceses que veían nuestros
ríos como un
paraíso. También Virginia en el
Caserío hacia lo mismo, en este caso pluma parda. Entonces ese endemismo de los gallos en el Curueño no tiene nada de cierto. ¡Ah! La pluma era de una calidad excelente.