Cuando mis abuelos ya habían hecho las
compras (unos albérchigos de la Bureba, y, a falta de las buenas
cerezas del
valle de Las Caderechas o de Covarrubias, unos higos de cualquier proveedor, amén de lo necesario para la
labranza o el
ganado, como piedralipe para las semillas, zotal para la corte del chino, el gallinero y la tenada de las
ovejas), pasó mi abuelo a recogernos sospechando que estaríamos muertos de sed.
¿Qué sos parece una gaseosa fresca --nos dice, a fuer de persona generosa y comprensiva--;
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