El acueducto segoviano es bellísimo, si quieres comprobarlo, baja una noche cuando Segovia duerme y acercate despacio hasta él. O madruga y sorprende al sol que nace jugando a disfrazarle de rosa y oro. El acueducto te parecerá entonces un gigante, un dragón, una fantasía hecha realidad, todo, menos lo que verdaderamente es, un conductor de cristalinas aguas.
Buenos dias Marcelino y amigos del foro de Segovia.
Un abrazo
Buenos dias Marcelino y amigos del foro de Segovia.
Un abrazo