AQUELLOS DÍAS TAN FRÍOS, LE DECIDIERON EL MARCHARSE
En aquellos días heladores, del mes de enero, de 1950, en la Castilla Profunda, aquel
joven trabajaba, recogiendo sarmientos en los viñedos, para poder ayudar económicamente a sus abuelos. Tenía 15, años recién cumplidos, y sin pensarlo demasiado, aquel domingo de finales de mes, al
amanecer el día, con sus manos llenas de grietas, y con muy poco dinero, se decidió irse hasta Medina del
Campo, para allí, poder subir al
tren, que le llevaría hasta
... (ver texto completo)