CUANDO LA NOCHE LLEGABA
En las noches de verano
cuando brillaban estrellas,
en su mundo castellano
se vieron veredas bellas.

Los pastores descansaban
al lado de sus rebaños,
mientras los perros ladraban
para evitar ciertos daños. ... (ver texto completo)

CAMINOS MUY RECORDADOS
Hay caminos reversibles
que no saben del pasado,
con palabras imposibles
de algún recuerdo olvidado.

Cuando se borran caminos
entre sueños despiadados,
temes que sus malos signos
dejen tiempos enlutados. ... (ver texto completo)

LOS DESTINOS MARCARON SUS HUELLAS
Recordando aquellos años de la emigración forzosa,
vamos conociendo daños de alguna vida horrorosa.

Se marcharon siendo niños con la cruz al hombro echada,
aunque tuvieron cariños era triste su mirada.

Empezaron nueva vida entre frases marginadas,
queriendo curar la herida de aquellas marchas forzadas.
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LA OTRA HISTORIA DE LA SECA. UNA TORMENTA.
Era en la mitad del mes de julio, del año 1953, esa mañana la Artillería de Medina del Campo, estuvieron haciendo practicas con sus cañones, se escuchaban desde La Villa sus explosiones, y sobre la una de la tarde el cielo empezó por la zona de Medina a ponerse muy oscuro, los labradores temieron que dicha tormenta se acercara a su término, desde Medina vino avanzando por los Llanos, el Calvillo, Las Cuatro Rayas y Las Sansares, y el cielo negro amenazaba ... (ver texto completo)

LA OTRA HISTORIA DE LA SECA
PASTORES LASECANOS DE HACE 70 AÑOS.
Aquellos años de trabajo diario sin descansar ni un solo día, eran verdaderamente una lucha diaria por poder alimentar a sus rebaños, sobre todo en estas fechas de invierno cuando la comida faltaba en sus terrenos o pagos, Eran días de niebla o frío intenso sobre aquel termino cercano al Río Duero, Me comentaron que había entonces más de cinco mil ovejas, que se repartían el termino en diferentes terrenos, algunos llegaban hasta la ... (ver texto completo)

LA OTRA HISTORIA DE LA SECA
PARA EL HAMBRE NO HAY PAN NEGRO
En el año de 1945, en España existió los llamados años del hambre, la falta de lluvia y otras anomalías hicieron tres o cuatro años de hambre, ya que no existía ni trigo o harina en los pueblos de España. fueron tiempos de estraperlo y racionamiento, las personas cuando veían algo que pudiera ser comida trataban de alcanzarlo como pudieran, incluso estaba racionado el aceite y el tabaco, y salian algunas personas por la noche al campo ... (ver texto completo)

LA OTRA HISTORIA DE LA SECA.
CUANDO LAS NUBES ESTABAN CERCA
Hubo tiempos de labranza
por los Campos de Castilla.
que brillaba la esperanza
entre la gente sencilla.

“Que las nubes están cerca,
que la lluvia se aproxima,
que tengo esta mula terca, ... (ver texto completo)

LA OTRA HISTORIA DE LA SECA
CUANDO LAS NAVIDADES SE ACERCABAN
Eran fechas de fríos con sus nieblas
en las tierras de Cuna del Verdejo,
con sus vientos que fueron de tinieblas
donde el Sol tan solo fue un reflejo.

Entre sueños cargados de esperanza
esperando gozar las navidades,
hubo giros con gritos de alabanza ... (ver texto completo)

NO CONOZCO A TANTA GENTE.
LA OTRA HISTORIA DE LA SECA.
Fueron años de tristezas
envueltas con soledades,
donde se vieron torpezas
con eternas falsedades.

Quedaron calles desiertas
de aquellas casas de adobes,
sin ver sus puertas abiertas, ... (ver texto completo)

LA SECA COSTUMBRES Y TRADICIONES.
LA OTRA HISTORIA DE LA SECA.
Cada tierra tiene sus costumbres, o por lo menos es lo más normal, En este Valle del Monte Iniesto, se han continuado algunas de esas costumbres ancestrales, Digamos el Arrope y el Dulce de Letuario, costumbres venidas del pueblo de Israel, donde en su capital se siguen ofreciendo como postres especiales sobre todo el dulce de Letuario, en los mejores restaurantes hebreos. Al fundarse, Seca, La, o entonces La Tala. El año 1500, después ... (ver texto completo)

LLAMASELO QUE TE LO VA A LLAMAR A TI.
LA OTRA HISTORIA DE LA SECA.
Hace ahora 72, años, que en la escuela de “Don Jesús el hijo,” como se le llamaba en La Villa, éramos testigos de varios niños con el pelo a cero, o digamos a ras del cráneo, eran tiempos de piojos y miseria, que después de tener el pelo de la cabeza tan rapado, sus familias les echaban vinagre de vino blanco, para que dichos piojos no les atacaran, y un buen día al salir de la escuela en la Calle del Cristo, se empezaron a pelear ... (ver texto completo)

LOS PENSAMIENTOS SE QUEDARON SIN RETORNO
Aquel amigo mío de hace setenta años me comentaba de niño, me iré muy lejos, donde no sufra desengaños, donde nadie me conozca, donde no cuenten los penosos años, donde solo el firmamento no me cause muchos daños. Todo marchaba en silencio, la mili fue su remanso, empezando vida nueva en otros queridos campos, Los pensamientos de niño se marcharon sin avisar de su llanto, empezaba su camino de dinero bien gastado. Los pensamientos de niño con el tiempo se ... (ver texto completo)

NO VALEN FLORES NI ENGAÑOS
No sirven flores ni engaños
en las horas de dulzuras,
algunos dejan los daños
con terribles amarguras.

Son pasiones mentirosas
que parecen ser diabluras,
no se necesitan rosas
ni pasajes con locuras. ... (ver texto completo)

LA OTRA HISTORIA DE LA SECA…
CUANDO SE CAYO LA TORRE
Era una tarde de finales de enero, yo me encontraba en el patio de mi casa alargando manojos de sarmientos a la manojera, Mi padre estaba encima de dichos manojos, y de repente exclamo “Que se cae, que se cae”, y yo le pregunte cual, y sonó un ruido atronador, al tiempo que mi padre exclamaba “LA TORRE”. Era entonces el párroco de La Seca. Don Félix Silicio Pardo. Que enseguida intento conocer el peligro tan grande que supuso su hundimiento, ... (ver texto completo)

LA OTRA HISTORIA DE LA SECA.
LO QUE ARGIMIRO ME CONTÓ.
Hace más de cuarenta años en una tarde de sol, Argimiro me contaba su historia con gran pudor. Me hablaba de las Campanas, de cómo a la Cima de La Torre se subió, de como la gente le miraba en aquella procesión. Le miramos con gran miedo, no era un pájaro volador, La Torre siempre preciosa era causar sensación. Desde la Calle del Teso se paró la Procesión, y dijo Don Exuperio este chaval a prisión. Pronto cogió su maleta, y ha Vascongadas marchó, ... (ver texto completo)