AQUELLOS TIEMPOS REMOTOS
Aquellos años remotos
que tuvieron fantasía,
no quisieron ver los cotos
de alguna mañana fría.
Cuando los sueños triunfaban
sobre prados y trigales,
y sus hombres alababan
muchas causas naturales.
Fueron años de esperanza
marcando la sementera,
con los arados en danza
recorriendo La Ribera.
Y el Duero como testigo
entre brisas otoñales,
tuvo al labrador de amigo
con el sudor a raudales.
Campos que dieron sus frutos
sin tener buenos salarios,
tormentas que fueron sustos
mientras dejaban calvarios.
Muchas ovejas pastando
por la Ribera del Duero,
pastores sacrificando
horas de amor verdadero.
Hachas de los leñadores
que sonaron con estruendo,
arados y labradores
siempre a su tierra sintiendo.
Voces llenas de lamentos
en esa Soria sufrida,
ecos con perdidos vientos
sin ver la senda elegida.
Los caminos del pasado
solo llevan al olvido,
donde el hombre enamorado
nunca quiso estar perdido.
G X Cantalapiedra.
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