DEZA (Soria)

Sólo estás en nuestra memoria

Réquiem por una Fuente.

En la Plaza había una Fuente
bonita y monumental.
¿Qué sería de su suerte
que la Fuente ya no está...?
Aun sabiendo que tú eras
una Fuente señorial
te quitaron de la Plaza
sin hace a nadie mal. ... (ver texto completo)
Hoy todavía tendremos en casa alguna trompa que es una pieza de madera torneada con un cuerpo abombado que va perdiendo sección a medida que va llegando al extremo donde irá ubicada la punta. La trompa se divide en tres partes que son: la coronilla o corona, que es una protuberancia que sale en la parte superior de la trompa; el cuerpo, que es el núcleo pesado; y la punta, cuyo material es de hierro y se empotra en la madera. Para hacer bailar la trompa se enrolla a su alrededor una cuerda de un ... (ver texto completo)
De mi niñez todavía conservo el hábito de coleccionar tabas pero he perdido la habilidad de jugar con ellas. En la actualidad las utilizo de manera muy diferente: como ayuda para desarrollar algunos programas de ejercicios en la rehabilitación física de pacientes con alguna patología de la mano. La versión moderna en plástico y de colores son los “go-gos”, me resultan realmente simpáticas. Las nuestras las pintábamos con laca de uñas, o con micromina. Mi pelota era pequeña, se adaptaba muy bien ... (ver texto completo)
¿Os acordáis de las chapas de Cinzano y de Mirinda? Dentro les poníamos una moneda (no puedo poner el nombre porque no sale) para que pesara mas, papel de plata, la cara de un ciclista y un cristal que moldeábamos nosotros a medida, sellado con masilla. Era el entretenimiento más habitual de los niños. En casa como tenía hermanos no faltaban.
Con nuestra colección de chapas hacíamos “Carreras de chapas”: Para este juego las chapas pueden emplearse tal y como se consiguen o bien se mejoran colocándoles ... (ver texto completo)
Lo del burro hacíamos lo que podíamos pues ese tipo de salto no a todos se nos daba bien. Saltar, saltar, lo que se dice saltar… éramos unos ases en lo de “Saltar a la goma”:

Para practicarlo tan sólo se requiere una goma de varios metros de largo, muy elástica, que las niñas adquiríamos en el comercio a tanto el metro y que después uníamos sus extremos por un nudo. Hace falta un mínimo de tres jugadoras, dos para sujetar la goma y otra que es la que salta. Ese número es considerado precisamente ... (ver texto completo)
En Deza las niñas jugábamos con las niñas y los niños con los niños, salvo cuando nos juntábamos todos en la plaza después de cenar para jugar a "polis y cacos".

Fuera del pueblo, ya en Bilbao, cuando a las niñas ya se nos permitía vestir pantalones jugábamos con los niños a "Saltar al burro":
Consiste en que un niño pase por encima de otro que permanece inclinado y que por ello recibe la denominación de burro. Lo normal es que el brinco se dé con las piernas separadas y apoyando las manos en ... (ver texto completo)
Uno de los juegos que hacíamos en grupo era jugar "al pañuelo":
Se forman dos bandos en los que los jugadores están numerados. En el centro del campo hay uno que sostiene un pañuelo y dice: "Que salga, que salga..." y cita un número. De cada bando sale hasta el centro el que tiene dicho número y ambos hacen varios amagos de arrancar el pañuelo para engañarse mutuamente, hasta que uno de los dos lo toma echándose a correr hacia su casa. Si el contrario le atrapa, queda eliminado; si no, es el otro ... (ver texto completo)
La actividad habitual a la que mas tiempo dedicábamos era a jugar. Cuando lo hacíamos en grupo empezábamos ya a pasarlo bien eligiendo a las personas que querías que jugaran de tu parte.
Decíamos “a hacer pies”:
Dos niños se colocan a cierta distancia uno frente al otro y se aproximan dando pasos por turno, de tal modo que sitúan el tacón del pie que avanza inmediatamente por delante y tocando la puntera del que permanece inmóvil en cada desplazamiento. Suele ser habitual que a medida que caminan uno diga "oro" y el otro "plata". Cuando la distancia que les separa es aparentemente menor que la longitud del pie de quien le toca la vez, éste pisa con el suyo la punta del que le sirve de apoyo en ese momento y el del contrincante, mientras dice "monta". A continuación lo introduce perpendicularmente entre ambos añadiendo "y cabe". Si se cumplen ambas condiciones, éste niño tiene derecho a ser el primero en elegir. En caso de que su intento resulte fallido, se vuelven a alejar y el que ha dicho "monta y cabe" inicia la aproximación.

¿Os acordáis?, que tengáis un buen día, C. ... (ver texto completo)
Leyendo a Roberto L. Blanco Valdés, Catedrático de Derecho Constitucional en la Universidad de Santiago, entresaco de un artículo suyo:
"Los olores son para mí, sin embargo, lo más inolvidable: el de la leche en polvo americana, puro refugallo del Plan Marshall; el de las gomas de borrar Milán de dos reales; el de las pizarras, que olían a frío, y el de los pizarrines, que olían a cemento; el de la tinta...y, por encima de todos, el de la miseria de aquella España que tenía aún la guerra atada al ... (ver texto completo)
La colaboración que narra la elaboración de la leche en polvo me trae también viejos recuerdos. Como habíamos de ir provistos de un vaso, el primer día me compré uno de cinc y lo llevé a la escuela. recuerdo como en una gran olla, una de las madres- creo que iban por turno-, se afanaba en quitar los grumos dando vueltas con una batidora de esas de alambre. Dejamos los vasos en la escuela y al día siguiente el mío apareció en el corralito interior todo aplastado. Por lo visto a bambi, el perro perdiguero ... (ver texto completo)
Aquí en Madrid, ayer y hoy, está lloviendo mucho. Las niñas de la foto en un día así, amortizando las botas de agua (me fascinaban hasta el punto de perderlas en los charcos de barro), jugábamos a "tío pásame el rió" de lado a lado en la calle de La Solana. Nos encantaba cantar eso de "que llueva, que llueva, la virgen de la cueva...", ponernos debajo de los canalones... Eso sí con un impermeable, el mío era azul cielo. Toda una experiencia, un saludo, C.
Hola, dezanos. Esta página me trae recuerdos de mi lejana niñez en deza. Buenos tiempos porque la infancia es la mejor etapa de la vida. Si, carecíamos de casi todo, pero éramos muy felices jugando en la plaza o asaltando un peral de malacara. Los niños de entonces creo que no sabíamos tanto como los actuales; no estábamos tan adelantados, tan adelantados que casi no son niños...es más efímera su niñez que la nuestra. Ahora enseguida se hacen hombrecitos reseponsables, les cargan esas horribles mochilas ... (ver texto completo)
La persona que colgó ésta foto en el foro no puede darte la fecha en que se hizo la fotografía puesto que no era suya y si la tiene, es por haber hecho una toma de vídeo de la fotografía que le mostraron en la Plaza. Pero puede que tengas razón y que sea de por los años 63-64. Un poco más adelante ya se quitó la Fuente pues fué en el año 1970 cuando desgraciadamente desapareció de su lugar de origen para nunca más volver a ocuparlo. Sigue con tus crónicas amiga C, que son muy bonitas. Gracias. Un ... (ver texto completo)
Hay muchas posibilidades de que a esas horas tuviera sueño pero la causa de que en los recuerdos que conservo haya hecho una derivación a que la leche la hiciéramos con la tetera es otra.

La foto corresponde al periodo en que tenia 5 años a unos meses de cumplir los 6 si no los había cumplido ya, depende si está realizada en otoño o en primavera. La persona que la ha colgado en el foro a lo mejor nos puede confirmar que está realizada en
1963-4.
En aquella época en la escuela recuerdo a de. ... (ver texto completo)
No se si no estarías un poco dormido o dormida a esas horas de la noche al interpretar que la leche se hacía en una tetera. Yo lo que leo textualmente en la redacción, es que la leche se preparaba con agua de la tetera que habín puesto a calentar, previamente en la estufa de serrín. Eso es que lo que nos dice la amiga C con muy buena descripción, composición de lugar y ortografía pues es una de las "plumas" más amenas de éste nuestro foro de Deza. Que conste en acta. Un abrazo.