El domingo pasado la U.de.S ascendió a 2ª División. Al final del partido, parte del público bajó al
campo de
juego para celebrar la victoria.
Yo también bajé y me fijé en el césped del campo. Me dió envidia de lo bién cuidado que estaba, y sentí cierta frustración al pensar que en
Villoria lo podríamos tener exáctamente igual y, sin embargo, no sé si por dejadez, incapacidad, o simplemente conformismo, tenemos un césped que se deteriora día a día.
El sembrar el césped costó el mismo dinero, que
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