A mis
amigos de Rinconada. Recuerdo cuando éramos jóvenes, estábamos llenos de ideales y soñábamos con cambiar el mundo. Pero quizás el mundo también nos ha cambiado a nosotros. Me gusta llegar a Rinconada y ver que todo ha cambiado a mejor; y sin embargo , a veces, también me invade la nostalgia; en cada uno de mis
paseos solitarios os echo de menos, me pregunto que habrá sido de vosotros; os recuerdo arando en las tierras, cerrando un portera, llevando el
ganado a los prados, mondando las pozas
... (ver texto completo)