HERRERA DE PISUERGA: Ciertamente, como bien dices, los pasos a nivel eran...

Ahora, desde la prespectiva de los años y recordando las duras faenas del campo
me viene a memoria, el duro trabajo de aquellos esforzados labradores, durante
las diversas faenas, hasta recoger el grano.
Antes de la aparición de la Segadora, tuvieron que sudar lo suyo, hacíendolo
con la Hoz. Aunque yo, sólo recuerdo Segadoras tiradas por mulas y vacas. Después
"acarreaban" las Nías hasta la Era, con aquellos carros cargados a tope con la
ayuda de aquellos armazones de madera, con unas "bolsas"de rede a las orillas.
Suponía un duro trabajo para hombres y bestias. ¡Que carradas! Con el peligro
de "entornar" por aquellos caminos.
Ya en la Era, se extendía la trilla con las horcas y después todo el santo día dando vueltas hasta que se "molía". Con la ayuda de la Aparvadera, se hacían
las parvas a la orilla de la trilla, o montón en el centro. Cuando se terminaba
de trillar, al final del verano, era la hora de veldar. Y a medida que se acerca-
ban las Fiestas, se metía el trigo en casa. Con el acarreo de la paja, se mancha-
ban las calles, y unos dias antes de "la función", el Ayuntamiento ordenaba el cese del acarreo de la paja.
Quizá a algunos, no les recuerde grandes momentos de su vida, pero para mí sí,
estos pequeños recuerdos de la infancia, nos indican que aquel tiempo fué real
y que muchos herrerenses lucharon toda su vida para que ésto fuera así y poder
contar ahora su historia. Fué el duro trabajo de nuestros antepasados.

ANGEL (herrerita):

Nos haces una buena crónica recordándonos cosas del pasado reciente de nuestro pueblo, entre otras nos apuntas los carros cargados con nías que faenaban de noche con el riesgo de entornar por aquellos caminos, cosa cierta que muchos lo sufrieron. Yo añade-ria también, el cruce de los pasos a nivel sin guarda ni barreras del ferrocarril. Y de hecho en Herrera durante la primera mitad del siglo pasado, hubo varios accidentes mortales de animales y personas en estos pasos. No tengo los suficientes datos o información para poderlos contar, si alguien se acuerda o lo sabe y quiere contarlo que lo haga, yo le quedaría agradecido. Saludos.

Ciertamente, como bien dices, los pasos a nivel eran trampas mortales.
El recuerdo que tengo de todo ésto, ya figura la caseta para la persona que
se encargaba de cerrar y abrir las vías. Suponía un trabajo fácil, pero de alta
responsabilidad, ya que un retraso en el cierre, podía suponer una verdadera ca-
tástrofe. Otra figura de la Renfe, con su dósis de responsabilidad, eran los en-
cargados de mover las agujas y cambiar la dirección de los trenes. Un descuido,
podía suponer un pequeño "choque".
En fín, las estaciones de trenes tuvieron su encanto, pero sólo han quedado en
otra historia para contar. ¡Es la vida!