Vista distinta de la portada de la Basílica de San Vicente, AVILA

Por la inseguridad que suponían las incursiones musulmanas, en 1062 el rey Fernando I de León y Castilla ordenó que los restos fueran trasladados al monasterio de San Pedro de Arlanza (Burgos) hasta que en 1175, con el avance de la Reconquista y el desplazamiento de la frontera hacia el sur, los cuerpos regresaron a su lugar de enterramiento original.
(4 de Septiembre de 2022)