Pertenece a la provincia de Guadalajara y está situado en la comarca de la campiña muy cerca del límite con la provincia de Madrid. Y a tan sólo 35 Km de la capital de la provincia (Guadalajara)

En sus monumentos destacan la Iglesia parroquial de San Bartolomé (Siglo XVI) con su torre y galería porticada, cubierta, con columnata y portada plateresca bajo pórtico y ornamentación lineal renacentista aunque el acceso actual al templo se hace por su cara norte. Su interior ha sido restaurado recientemente, con una gran colaboración en dicha obra de los habitantes del pueblo. Consta de tres naves, con retablo renacentista, coro y capilla.

Las fiestas patronales son el segundo domingo de septiembre, en honor a la Virgen de los Olmos. En las fiestas se celebran actos religiosos, festejos taurinos y baile popular.
Respecto a otras tradiciones populares, cabe mencionar la celebración de Santa Águeda, o fiesta de las mujeres, la Romería en la ermita en el mes de mayo y la fiesta de San Bernabé el 11 de junio, antiguamente de gran notoriedad por la celebración de una feria de aperos.

Casa de Uceda perteneció como aldea al señorío de Uceda. En 1575 el rey Felipe II la vende a Don Diego Mexía de Ávila y Ovando, quien se convertiría en el Conde de Uceda, y el cual confinó en esta aldea a un hijo bastardo, que padecía además, alguna enfermedad mental o defecto físico que le hacía ser la vergüenza de tan noble familia.
En 1593, tras diversos pleitos, los vecinos ejercen su derecho de tanteo en la venta del Señorío de Uceda y compran la exención de jurisdicción del Condado de Uceda y así Casa de Uceda adquiere el título de Villa definitivamente.
Respecto a su historia comentar también que Juan Martín Díez, el famoso guerrillero llamado «el Empecinado» se refugió en Casa Uceda y en el vecino pueblo de Valdepeñas de la Sierra mientras las tropas napoleónicas asolaban Torremocha, Uceda, Buitrago, Venturada y Torrelaguna, entre otras poblaciones, durante la Guerra de la Independencia Española que estalló en el siglo XIX.