Alrededores de El Puente Zafra, ALCONCHEL DE LA ESTRELLA

"El Puente Zafra"

Es un enclave del Término Municipal, situado en el Noroeste del Término, a los pies de la "Sierra de Mirabueno", rodeado por los parajes de "Peñarrubia", "Las Hoyuelas", "El Cubillo" y "El Alporchón", además de la mencionada Sierra de "Mirabueno". El puente del que recibe su nombre se asienta sobre el "Arroyo Cazarejo", en el cruce entre los caminos de "Camino a Villar de Cañas" y "Camino de Carretera Vieja", estos, junto al "Camino de Vega Fría", le dan su servidumbre. El paraje es típico de zona de vega estando regado por los arroyos de "Cazarejo" y "Arroyo de El Derramadero". Está dedicado, salvo la zona de torcas, al cultivo de cereales y girasoles.

Arroyo

Un arroyo, riachuelo, rivera, cala o quebradanota​ es una corriente natural de agua que normalmente fluye con continuidad, pero que a diferencia de un río, tiene escaso caudal, que puede incluso desaparecer en la estación seca, verano o invierno, dependiendo de la temporada de lluvia para su existencia. En el caso de tener un caudal muy escaso y esporádico, es preferible usar el nombre de torrente, rambla o cañada.

F. J. Monkhouse da tres acepciones del término arroyo:

1. Caudal corto de agua, casi siempre continuo, y cauce por donde transcurre.
2. En América, río de corta extensión, aunque puede ser navegable para embarcaciones de regular tamaño.
3. En algunas regiones áridas de América Latina, rambla

F. J. Monkhouse

Un arroyo puede tener, especialmente en su curso montañoso: cuenca de recepción, canal de desagüe y cono de deyección (consultar el término torrente).

Por otra parte, un vado es el sitio donde el arroyo es tan poco profundo que se puede cruzar a pie o sirve para bañarse. A estos vados los llaman baños, bañaderos, balnearios, cruces o pasos en algunos países de América del Sur. Cuando es muy angosto se le llama cañada y cuando se embalsa el agua de forma natural se llama poza o laguna y si es artificial presa, represa o embalse.

Al igual que los ríos, pueden desembocar en el mar, en un lago o en otro río, en cuyo caso se denominan afluentes de este.

En algunos países de América del Sur algunos “arroyos” son verdaderos ríos, que puede llegar a ser muy caudalosos e incluso navegables. También en América del Sur y específicamente en Barranquilla se les llama “arroyos” a las corrientes de agua de lluvia que corren sobre las vías de la ciudad, generalmente a gran velocidad, lo que dificulta notablemente la movilidad y reduce la seguridad de los transeúntes.

Paraje

Paraje es un término que se utiliza en los pueblos de habla hispana para denominar un punto geográfico de una provincia o estado que puede estar habitado o no, y que generalmente cuenta con pobladores dispersos en un área rural.

Un paraje puede ser un pueblo,​ una aldea o simplemente una zona determinada en el camino de los viajeros o turistas. Los parajes normalmente están separados entre sí por distancias que varían según la geografía del lugar, y mayoritariamente cuentan con abundante agua para las personas que allí habitan.

Los censos consideran a los parajes por la dispersión poblacional de un estado y son tenidos en cuenta a la hora de llevarse a cabo el relevamiento censa
(19 de Junio de 2021)
- EL ALMANAQUE DEL HUMOR -

Una chispa de humor cada día para alegrarte el ánimo.

Evolución y progreso.

Enunciados de un problema matemático.

La reforma de la enseñanza nos interesa a todos. Un grupo de docentes ha examinado la cuestión del enunciado de un problema.
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Santa Mónica es puesta por la Iglesia como ejemplo de mujer cristiana, de piedad y bondad probadas, madre abnegada y preocupada siempre por el bienestar de su familia, aun bajo las circunstancias más adversas.
Sin embargo, África los reclamaba, emprendieron su viaje, se detuvieron en Cività Vecchia y en Ostia. Aquí la muerte sorprendió a Mónica, y las páginas más bellas de las Confesiones de Agustín fueron escritas como resultado de la emoción que experimentó Agustín por la muerte de su madre.
La madre, el hijo y su nieto Adeodato pasaron seis meses de verdadera paz en Rus Cassiciacum, actualmente Cassago Brianza, luego Agustín fue bautizado. A la edad de 28 años, Agustín acogió la gracia de Dios, se convirtió al cristianismo y recibió el bautismo en la iglesia de San Juan Bautista en Milán.
Mónica siguió a su indisciplinado hijo a Roma, donde él había ido secretamente; cuando ella arribó él ya se había ido a Milán, pero lo siguió. Allí ella encontró al obispo Ambrosio de Milán y a través de él finalmente tuvo la dicha de ver la conversión de Agustín al cristianismo tras 17 años de resistencia.