ALCONCHEL DE LA ESTRELLA (Cuenca)

El arrañal está siendo cosechado
Foto enviada por Gabriel

Cada día está más caro morir. No queda más remedio que seguir viviendo.
Actualmente los hombres acaban sintiendo menor apoyo social para ejercer su rol de padres y a la vez compaginarlo con su vida laboral, mientras que para las mujeres está considerado como "lo normal"
...
Clarke pensaba ya en el día en que un hombre de negocios, ya se encontrase en Nueva York, Londres o Ceilán podría sentarse ante un centro de comunicaciones del tamaño de una mesa y cumplir toda una jornada de trabajo sin tener que salir siquiera de sus casa. "Ha de llegar el día en que hasta un cirujano que viva en determinado lugar pueda operar desde allí a pacientes establecidos en cualquier otra parte del mundo por medio de manos artificiales dirigidas por mandos a distancia", decía Clarke...
...
Creía Clarke, sin embargo, que el papel más importangte del satélite de comunicaciones consistiría en llevar la educación a millones de personas, mediante emisiones en directo de televisión a escuelas u hogares.
Pero, sobre todo, Clarke opinaba que el mundo de los satélites de comunicación sería un mundo unido. "A la larga", decía en The Promise of Space, "el stélite de comunicaciones será más poderoso que el proyectil balístico intercontinental."
...
Después de este sensacional éxito fílmico, cuya elaboración tardó cuatro años, Clarke se entregó de nuevo a sus múltiples actividades.

Nada es imposible.

A principio de los años 70 Clarke pensaba que muchos de los progresos científicos más importantes serían debidos al satélite de comunicaciones. Creía que la facilidad de comunicación rápida que se obtendría por medio de tales satélites, acabaría con la necesidad de que la gente se reuniese en las ciudades para sus actividades comerciales...
...
Clarke pensaba ya en el día en que un hombre de negocios, ya se encontrase en Nueva York, Londres o Ceilán podría sentarse ante un centro de comunicaciones del tamaño de una mesa y cumplir toda una jornada de trabajo sin tener que salir siquiera de sus casa. "Ha de llegar el día en que hasta un cirujano que viva en determinado lugar pueda operar desde allí a pacientes establecidos en cualquier otra parte del mundo por medio de manos artificiales dirigidas por mandos a distancia", decía Clarke...
CONTINUAMOS CON EL PROFETA DE LA ERA ESPACIAL.

...

Para captar las encumbradas visiones del autor en cuanto al futuro de los vuelos espaciales, Kubrick empleó a 36 diseñadores técnicos, procedentes de doce países. La realización del filme fue tan compleja que hubo de establecer una sala de mando con una dotación de cuatro hombres para coordinar las actividades del cuerpo de producción, integrado por 106 personas. El resultado fue una de las películas más complicadas desde el punto de vista ... (ver texto completo)
...
Después de este sensacional éxito fílmico, cuya elaboración tardó cuatro años, Clarke se entregó de nuevo a sus múltiples actividades.

Nada es imposible.

A principio de los años 70 Clarke pensaba que muchos de los progresos científicos más importantes serían debidos al satélite de comunicaciones. Creía que la facilidad de comunicación rápida que se obtendría por medio de tales satélites, acabaría con la necesidad de que la gente se reuniese en las ciudades para sus actividades comerciales...
...
a pesar de su posición, Clarke vivió muy modestamente. Divorciado de su mujer (norteamericana) y sin hijos, vivía solo en un elegante rincón de Colombo, capital de Ceilán. vestía tambien con gran sencillez, no fumaba y bebía, sólo de vez en cuando, y era indiferente a los placeres de la mesa.

Para un hombre que escribía tanto de actividades extraterrestres, es curioso que las aventuras personales de Clarke ocurrían casi siempre bajo el agua. Con Michel Wilson, exparacaídista del Ejército ... (ver texto completo)
CONTINUAMOS CON EL PROFETA DE LA ERA ESPACIAL.

...

Para captar las encumbradas visiones del autor en cuanto al futuro de los vuelos espaciales, Kubrick empleó a 36 diseñadores técnicos, procedentes de doce países. La realización del filme fue tan compleja que hubo de establecer una sala de mando con una dotación de cuatro hombres para coordinar las actividades del cuerpo de producción, integrado por 106 personas. El resultado fue una de las películas más complicadas desde el punto de vista ... (ver texto completo)
¡Jolines, mañana continúo con Clarke! Jajajajaja Es que se "m´a metío" una paja en el ojo y veo menos que un pez frito, así que mañana continúo con él.

... Y como decía aquel: No era nada lo del ojo, y lo llevaba en la mano...
...
Con su licenciatura en la mano, Clarke poseía ahora los conocimientos científicos necesarios para escribir los "cuentos" que había venido eleaborando desde su adolescencia,, y pronto empezó a vender sus relatos de ciencia-ficción a las revistas más importantes. Su primer libro, Interplanetary Flight ("Vuelo interplanetario"), se publicó en 1950, y desde entonces fue produciendo obras científicas tanto reales como noveladas con profusión asombrosa llegando a ser el más conocido y mejor pagado ... (ver texto completo)
...
a pesar de su posición, Clarke vivió muy modestamente. Divorciado de su mujer (norteamericana) y sin hijos, vivía solo en un elegante rincón de Colombo, capital de Ceilán. vestía tambien con gran sencillez, no fumaba y bebía, sólo de vez en cuando, y era indiferente a los placeres de la mesa.

Para un hombre que escribía tanto de actividades extraterrestres, es curioso que las aventuras personales de Clarke ocurrían casi siempre bajo el agua. Con Michel Wilson, exparacaídista del Ejército ... (ver texto completo)
...
Este grupo formó un organismo con el pomposo nombre de Sociedad Interplanetaria Británica. "Éramos unos doce, la mayoría de veinte a treinta años", recordaba Clarke con agrado. Aunque ninguno de aquellos entusiastas muchachos tenía realmente estudios científicos o técnicos, llegaron con el tiempo a proyectar y diseñar un vehículo espacial capaz de llevar tres hombres a la Luna y traerlos de vuelta. Nadie les hizo mucho caso, como no fuera para burlarse de ellos (No debería sorprendernos saber ... (ver texto completo)
...
Con su licenciatura en la mano, Clarke poseía ahora los conocimientos científicos necesarios para escribir los "cuentos" que había venido eleaborando desde su adolescencia,, y pronto empezó a vender sus relatos de ciencia-ficción a las revistas más importantes. Su primer libro, Interplanetary Flight ("Vuelo interplanetario"), se publicó en 1950, y desde entonces fue produciendo obras científicas tanto reales como noveladas con profusión asombrosa llegando a ser el más conocido y mejor pagado de los escritores de ciencia-ficción de todo el mundo... ... (ver texto completo)
...
El momento más memorable de su niñez fue cuando, a los trece años, se encontró algunos ejemplares de revistas como Amazing Stories (Historias asombrosas) y Astounding Sories (Historias Pasmosas). "Durante varios años coleccioné todos los números que pude", decía con nostalgia. "Estas revistas encendieron la imaginación de toda una generación de autores de novelas de ciencia-ficción".

El mismo empezó a escribir este género de narraciones para la revista de su escuela de Taunton. No pudiendo ... (ver texto completo)
...
Este grupo formó un organismo con el pomposo nombre de Sociedad Interplanetaria Británica. "Éramos unos doce, la mayoría de veinte a treinta años", recordaba Clarke con agrado. Aunque ninguno de aquellos entusiastas muchachos tenía realmente estudios científicos o técnicos, llegaron con el tiempo a proyectar y diseñar un vehículo espacial capaz de llevar tres hombres a la Luna y traerlos de vuelta. Nadie les hizo mucho caso, como no fuera para burlarse de ellos (No debería sorprendernos saber que aquel proyecto, entonces risible en apariencia, tenía una semejanza asombrosa con los vehículos que se usaron después en los vuelos espaciales.)

Cuando terminó la Segunda Guerra Mundial, Clarke pudo al fin matricularse en el Kings College, en Londres, y dos años más tarde se licenció con las más altas calificaciones en ciencias físicas y en matemática pura y aplicada... ... (ver texto completo)
...
Inexpertos entusiastas.

Arhtur Clarke se interesó por la ciencia desde que tenía diez años, cuando su padre, agricultor de Somerset (Inglaterra), le regaló unas estampas que venían en los paquetes de cigarrillos y que formaban una serie de láminas de animales prehistóricos. Pronto cambió el interés del chico de la paleontología a la astronomía, y Arthur se fabricó un pequeño telescopio con un tubo de cartón y unas lentes. "Me pasaba las noches dibujando mapas de la Luna", contaba, "hasta ... (ver texto completo)
...
El momento más memorable de su niñez fue cuando, a los trece años, se encontró algunos ejemplares de revistas como Amazing Stories (Historias asombrosas) y Astounding Sories (Historias Pasmosas). "Durante varios años coleccioné todos los números que pude", decía con nostalgia. "Estas revistas encendieron la imaginación de toda una generación de autores de novelas de ciencia-ficción".

El mismo empezó a escribir este género de narraciones para la revista de su escuela de Taunton. No pudiendo ... (ver texto completo)
...
La única recompensa que recibió Clarke por su revolucionario concepto fue el pequeño cheque que le pagó la revista "Wireless World" por un artículo que tituló "Cómo perdí mil millones de dólares en mis horas libres". Fue el satélite de comunicaciones, por cierto, el que hizo posible que alrededor del mundo se viera por televisión el vuelo espacial del Apolo VIII...
...
Inexpertos entusiastas.

Arhtur Clarke se interesó por la ciencia desde que tenía diez años, cuando su padre, agricultor de Somerset (Inglaterra), le regaló unas estampas que venían en los paquetes de cigarrillos y que formaban una serie de láminas de animales prehistóricos. Pronto cambió el interés del chico de la paleontología a la astronomía, y Arthur se fabricó un pequeño telescopio con un tubo de cartón y unas lentes. "Me pasaba las noches dibujando mapas de la Luna", contaba, "hasta ... (ver texto completo)
...
Veinte años después, contaba Clarke, estando en compañía del entonces vicepresidente de los Esatdos Unidos Hubert Humphrey, presenció por televisión en circuito cerrado el lanzamiento y puesta en órbita, a 35.760 kilómetros sobre el ecuador, de un satélite de 38,5 kilos, en forma de tambor, al que se dio el nombre de "Pájaro del Alba". Con ello se inauguraba una nueva era en las comunicaciones mundiales, en la forma que él había predicho...
...
La única recompensa que recibió Clarke por su revolucionario concepto fue el pequeño cheque que le pagó la revista "Wireless World" por un artículo que tituló "Cómo perdí mil millones de dólares en mis horas libres". Fue el satélite de comunicaciones, por cierto, el que hizo posible que alrededor del mundo se viera por televisión el vuelo espacial del Apolo VIII...
...
Poco después de la Segunda Guerra Mundial, siendo un joven radarista en la Real Fuerza Aérea, Clarke publicó en una revista de radio llamada Wireless World una descripción exacta de cómo tres satélites terrestres, colocados en altas óbitas, podrían servir comoestaciones retransmisoras para llevar emisiones de televisión y radio a todo el globo. Los satélites -decía en su artículo- tendrían que situarse a 35.000 kilómetrossobre la Tierra, y el plano de sus órbitas tendría que coincidir con el ... (ver texto completo)
...
Veinte años después, contaba Clarke, estando en compañía del entonces vicepresidente de los Esatdos Unidos Hubert Humphrey, presenció por televisión en circuito cerrado el lanzamiento y puesta en órbita, a 35.760 kilómetros sobre el ecuador, de un satélite de 38,5 kilos, en forma de tambor, al que se dio el nombre de "Pájaro del Alba". Con ello se inauguraba una nueva era en las comunicaciones mundiales, en la forma que él había predicho...
...
"Todavía había mucho que hacer en Europa cuando Colón partió del Viejo Continente... y todavía sigue quedando mucho que hacer allí; pero el descubrimiento de un nuevo mundo liberó el pensamiento del hombre del prolongado letargo de la Edad Media y alimentó los fuegos del Renacimiento. Colón llegó justamente a tiempo. Yo creo que también las naves espaciales han llegado justamente a tiempo", dijo.

La más famosa de las profecías de Clarke que se han convertido en realidad es la referente al ... (ver texto completo)
...
Poco después de la Segunda Guerra Mundial, siendo un joven radarista en la Real Fuerza Aérea, Clarke publicó en una revista de radio llamada Wireless World una descripción exacta de cómo tres satélites terrestres, colocados en altas óbitas, podrían servir comoestaciones retransmisoras para llevar emisiones de televisión y radio a todo el globo. Los satélites -decía en su artículo- tendrían que situarse a 35.000 kilómetrossobre la Tierra, y el plano de sus órbitas tendría que coincidir con el ... (ver texto completo)