Si sólo fuera el paso para acceder al otro lado del
pueblo. Pedir a los
Santos que no llueva, la
carretera (si se le puede llamar carretera) está fina y pulida como una pista de patinaje ya es peligrosa sin
lluvia, no os cuento con lluvia.Al bajar, más de una posadera quedará pegada en el suelo, amén de algún que otro tobillo, no sirve ni el calzado con bastante dibujo, pisar con seguridad y aplomo ladeando un poco los pies ¿para cuándo una capa de asfalto antideslizante? a la larga se ahorrarian
... (ver texto completo)