El arquitecto brasileño Oscar Niemeyer (creador de la ciudad de Brasilia y uno de los mitos de la
arquitectura universal) recibió el
Premio Príncipe de
Asturias de las Artes en 1989, siendo este el origen de la relación del arquitecto con el Principado de Asturias. Años más tarde donaría un gran proyecto al Principado de Asturias que se convertiría en una de los referentes culturales internacionales, un espacio asociado a la excelencia y dedicado a la educación, la cultura y la paz.