Buenos días paisanos, abandonemos el pesimismo.
La gente tiende al pesimismo.
Es como una postura más intelectual.
El pesimista, el que está quemado con todo, es más cinematográfico.
Parece más enigmático. Más meditabundo. Más inteligente. Incluso, si esta aptitud va acompañada con miradas al horizonte y frases un tanto grandilocuentes de persona castigada por la vida, puede que más f...
Pero a mí me gusta reír. Valorar las cosas que tengo. Disfrutar de la vida, desde los sótanos a lo sublime, desde lo básico a lo complejo, desdelo simple a lo difícil.
Quizás como forero debería ser más profundo. Manifiestamente más aburrido.
Poner cara seria y citar a Cioran.
Me gusta Cioran, pero no suelo citarle.
Me parece el típico filósofo adolescente que da a todo y a todos desde una óptica idealista y demasiado humanizada de la realidad.
Es divertido ver gente adulta pensando como niños.
Y es divertido ver a niños pensar como adultos.
Poco se dice aquello de «estoy increible», porque suena feo, y en un país de envidiosos como España más aún.
Pero no me puedo quejar. Animo, que la prensa exagera demasiado. Tienen que vender.
Animo paisanos, no llegará la sangre al rio.
La gente tiende al pesimismo.
Es como una postura más intelectual.
El pesimista, el que está quemado con todo, es más cinematográfico.
Parece más enigmático. Más meditabundo. Más inteligente. Incluso, si esta aptitud va acompañada con miradas al horizonte y frases un tanto grandilocuentes de persona castigada por la vida, puede que más f...
Pero a mí me gusta reír. Valorar las cosas que tengo. Disfrutar de la vida, desde los sótanos a lo sublime, desde lo básico a lo complejo, desdelo simple a lo difícil.
Quizás como forero debería ser más profundo. Manifiestamente más aburrido.
Poner cara seria y citar a Cioran.
Me gusta Cioran, pero no suelo citarle.
Me parece el típico filósofo adolescente que da a todo y a todos desde una óptica idealista y demasiado humanizada de la realidad.
Es divertido ver gente adulta pensando como niños.
Y es divertido ver a niños pensar como adultos.
Poco se dice aquello de «estoy increible», porque suena feo, y en un país de envidiosos como España más aún.
Pero no me puedo quejar. Animo, que la prensa exagera demasiado. Tienen que vender.
Animo paisanos, no llegará la sangre al rio.