En la fachada principal, sobre la puerta de acceso al templo, encontramos esta imagen de San Silvestre, titular del templo.

En la bóveda de medio cañón, se contempla "La Gloria" que pintara Domingo Nieto en 1680, ordenadamente distribuida en círculos -querubines, ángeles, músicos, santos- alrededor de la Santísima Trinidad acompañada de la Virgen Mediadora.

"La Gloria, detalle del retablo mayor y pintura mural de la bóveda del presbiterio de la iglesia parroquial de San Silvestre.

Talla del siglo XIV: "El Cristo de la Largueza"

Se trata de la primera rotonda, en el Polígono de Los Villares, llegando desde Valladolid. Desde aquí puede continuarse a Salamanca, al Pueblo de Los Villares de la Reina y a Cabrerizos; además de permitir el acceso a distintas naves industriales de la zona.

Las semillas de las amapolas se está convirtiendo en un alimento muy popular; dicen que tienen grandes propiedades, se utilizan en horneados (pan) y en ensaladas, principalmente, pero también pueden combinar bien con otros alimentos.

Campos de color rojo una visión breve que la Naturaleza nos da durante los días que dura la floración de la amapola.

Lo moderno y lo antiguo se entremezclan en este pueblo de la periferia de la capital charra.

Asfaltado impoluto en todo el pueblo, pero escaso de espacios verdes en los que descansar, tomar el sol o pasear.

Moderna construcción dedicada a sede del Ayuntamiento de la localidad que ha llevado aparejado la urbanización y creación de una nueva plaza, donde lo más característico de la misma es la poca vegetación plantada.

La belleza en verjas y rejas de las puertas de los edificios de otros tiempos son difíciles de encontrar en las construcciones modernas en las que todo es más simple y sin adornos.

Bajo la ventana aireadora del sobrao observamos el grabado entre hojas de los elementos o utensilios que mejor pueden definir a un labrador: el arado, el yugo y la aijada o varejón para guiar a los bueyes.

Los muros están marcados con por las estaciones del Vía Crucis, inician y finalizan su recorrido en la portada de la iglesia presidida por San Silvestre, que es el nombre de la iglesia y patrono del pueblo.

Poco de aquel pasado de labradores de cereal y legumbres queda en este pueblo. Sus fértiles tierras han sido ocupadas por el cemento de las calles y casas; el polígono industrial, las urbanizaciones residenciales y el propio casco urbano de la antigua aldea ocupa buena parte del término municipal y pocas muestras de aquel pasado agrícola podemos ver todavía. Esta gran puerta que permitía el paso de los carros tirados por bueyes es una de las pocas que quedan en el pueblo, eso sí hace decenas de décadas ... (ver texto completo)