Sus bocas se tornaron picos
y en garras se convirtieron sus pies
alas nacieron en sus espaldas
negras alas de negro plumaje
sus ojos redondos como canicas
parecían saltar de sus negras caras
caras de negro plumaje y repletas de plumas
de negras plumas que cubrían
piernas, brazos y rostros…
y corazones.
Las niñas y los niños cuervo
no nacieron así
nacieron bellos y risueños
y diferentes
todos nacemos diferentes
por muy iguales que parezcamos
qué aburrido sería si todos iguales naciéramos
o iguales todos nos volviéramos
incluso los niños y las niñas cuervos
son diferentes.
Las niñas y los niños se volvieron cuervos
porque sus padres o sus madres
que nacieron bellos y risueños
y diferentes
como ellos
un día se volvieron cuervos
empezaron a molestar a otros niños
o a otras niñas
porque eran rubias o morenos
o altas o bajos
o de pelo largo o con pelo corto
o con la nariz de una manera
o las orejas de otra
o porque tenían gafas
o porque corrían o andaban diferente
a otros niños o a otras niñas
o porque su piel tenía otro color
o porque hablaban ‘raro’
o utilizaban otras palabras
o porque habían nacido en otro lugar…
qué más da
o simplemente porque los niños y las niñas cuervos
y las madres y los padres cuervos
solo saben molestar e insultar
para intentar humillar
al que consideran diferente.
Quizá no se vean así mismos
quizá serían incapaces de reconocerse
si se encontrasen por la calle
en los colegios
en los trabajos…
en los parques.
Ayudemos a los niños y las niñas cuervos
y a las madres y a los padres cuervos
a que dejen de serlo
que entiendan que todos somos diferentes
pero que tenemos los mismos derechos
enseñémosles a ayudar a los demás
mostrémosles nuestro cariño para con el otro.
No sigáis a las niñas y a los niños cuervos
ni a los padres y a las madres cuervos
podríais volveros como ellos
y al final
como ellos os quedaréis solos
nadie quiere a su lado graznidos
en lugar de palabras
ni picotazos en lugar de abrazos…
ni corazones negros de negro plumaje.
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