![Ermita de Santa Cruz](/fotos_reducidas/6/8/8/00091688.jpg)
La
parroquia de
Artazu está dedicada a
San Miguel Arcángel.
Se trata de
edificio que ha sufrido muchas transformaciones a lo largo de los siglos. En su origen era un templo pregótico, en el que se realizaron obras en 1.549 por el cantero Juan De Inchaurrondo y en 1.633, año en que se documenta la
fábrica de toda la
iglesia a cargo del cantero Pedro Urdinarán. Finalmente, en la época neoclásica, se reformó en profundidad, adquiriendo el aspecto definitivo. Tiene planta de
cruz latina con crucero cuadrado y cabecera rectangular, la nave del siglo XIII se estrecha en relación con el resto de la obra del siglo XVII. Al exterior se aprecian las diferentes fases constructivas; la
puerta de acceso tiene
arco de medio punto renacentista y está protegida por un
pórtico cubierto con
bóveda de crucería estrellada y
torre erigida a sus pies. En su interior destaca la talla romanista de un Crucificado, de principios del siglo XVII, realizada por el estellés Domingo de Bidarte y la
Virgen del Rosario, obra de Bernabé Imberto de fines del siglo XVI.
La sacristía conserva una imagen de San Miguel, expresivista del segundo tercio del siglo XVI, varios cálices (algunos puzonados) y una cruz parroquial de plata, neoclásica y punzonada por Sasa.
En el
campanario se “conserva” la maquinaria de un antiquísimo
reloj.
A un cuarto de hora de
camino hacia Soracoitz, se encuentra la
ermita de
Santa Cruz, del siglo XVI, aunque se transformó en el XIX y posteriormente en el XX
En su
caserío abundan las construcciones de dos o tres cuerpos con medios puntos de ingreso.
Existen varias
casas blasonadas con
escudos rococós.
En una
casa particular se guardaba la Virgen de Gorriza que data del siglo XIII y procede de la ermita de su nombre en el
pueblo de
Guirguillano, donde ahora descansa.