Pese a su estado actual, era el templo dominico más grande de
Galicia. En pie sólo quedan la cabecera de cinco
ábsides y parte del muro sur, así como la entrada al capítulo, ya que el
convento, el
claustro y las dependencias se perdieron.. Era un templo de estilo
gótico de una sola nave cubierta con techos de madera y ábsides cubiertos por
bóvedas de crucería. Sus cinco
capillas quedan en pie en bastante buen estado.