El sistema abaluartado de
Badajoz consiste en un conjunto de
murallas, fuertes, baluartes, fosos y revellines construida en los siglos XVII y XVIII que protegían esta ciudad fronteriza, siguiendo las teorías defensivas de construcción popularizadas por el ingeniero
militar francés Vauban
El recinto defensivo se empezó a construir a mediados del siglo XVII, motivada por las tensiones entre
España y
Portugal durante la guerra de Restauración portuguesa y la cercanía de la ciudad a la frontera.
La antigua cerca
medieval de la ciudad se había quedado anticuada debido al uso de la artillería. Paulatinamente se va sustituyendo esta
muralla por una nueva adaptada a las nuevas corrientes de la ingeniería militar: muros más bajos y más anchos, para resistir a los disparos de cañones, y la introducción de baluartes y semibaluartes para dificultar la acción del enemigo