ME HABLABAN DE TREMENDISMO
No quise tener en cuenta esas palabras tan raras, se volvían vanidosas y quizá quise enmarcarlas. Palabras de tremendismo entre luces apagadas, sombras que buscan abismo en las noches relajadas. Con precios desorbitados en locales y terrazas, los jubilados entienden que nuestras pagas son lacias. No valen los presupuestos ni las tardes marginadas, que no comenten impuestos con las luces apagadas. La cartera tiritando, ojo que no falte nada, la vista se va perdiendo sin ... (ver texto completo)
No quise tener en cuenta esas palabras tan raras, se volvían vanidosas y quizá quise enmarcarlas. Palabras de tremendismo entre luces apagadas, sombras que buscan abismo en las noches relajadas. Con precios desorbitados en locales y terrazas, los jubilados entienden que nuestras pagas son lacias. No valen los presupuestos ni las tardes marginadas, que no comenten impuestos con las luces apagadas. La cartera tiritando, ojo que no falte nada, la vista se va perdiendo sin ... (ver texto completo)