AQUEL TIEMPO ERA CAMINAR
Hace tiempo que pisaba
carreteras sin asfalto,
su vida sacrificaba
sin soltar jamás un llanto.
Iba buscando trabajo
por los pueblos de la sierra,
y conociendo el atajo
de los caminos de tierra.
Albañil de profesión
en tejados con cubiertas,
siempre buscando emoción
sin llamar a ciertas puertas.
Torrelodones marcando
muchas horas de su vida,
el sudor le fue dejando
en cualquier obra querida.
Sin pensar en los retornos
ni en las tardes siempre frías,
conociendo los contornos
de aquellas sufridas vías.
Sus tremendas madrugadas
allí por la sierra fría,
fueron rutas escarchadas
sin ninguna simpatía.
Sin conocer el mañana
ni pensar en la agonía,
su vida nunca fue vana
derrochando la alegría.
Desde Hoyo de Manzanares
sin esperar la porfía,
recorriendo los lugares
en perfecta sintonía.
G X Cantalapiedra.
Hace tiempo que pisaba
carreteras sin asfalto,
su vida sacrificaba
sin soltar jamás un llanto.
Iba buscando trabajo
por los pueblos de la sierra,
y conociendo el atajo
de los caminos de tierra.
Albañil de profesión
en tejados con cubiertas,
siempre buscando emoción
sin llamar a ciertas puertas.
Torrelodones marcando
muchas horas de su vida,
el sudor le fue dejando
en cualquier obra querida.
Sin pensar en los retornos
ni en las tardes siempre frías,
conociendo los contornos
de aquellas sufridas vías.
Sus tremendas madrugadas
allí por la sierra fría,
fueron rutas escarchadas
sin ninguna simpatía.
Sin conocer el mañana
ni pensar en la agonía,
su vida nunca fue vana
derrochando la alegría.
Desde Hoyo de Manzanares
sin esperar la porfía,
recorriendo los lugares
en perfecta sintonía.
G X Cantalapiedra.
