Que pena de
columna, el encuadre tiene todos los ingredientes para ser una gran
fotografía. Pero lógico, no la vamos a derribar para hacer la
foto. Si lo miramos por el lado positivo la divide en dos partes. Una, donde está el
faro, parece que contando los minutos que le faltan para lanzar sus haces esperanzadores, y la otra ese horizonte lejano, clareado por un haz de luz que baja del
cielo. Sutevo.