Que en todas partes cuecen fabas y en mi casa a calderadas, parece que la gente lo tiene ya muy asimilado.
Por aquí (el oasis), algunos de nuestros representantes políticos se salen por la tangente y, sin conocer el percal, lanzan a bombón, platillos y castañuelas eso de que hay que eliminar el PER, en Estremadura y Andalucia porque es un dispendio que se debe atajar y que socava las arcas públicas, arcas, que según ellos, se llenan gracias a los dineritos que aportan “los catalanes”. Claro, quieren decir ellos, porque “els altres” no. Parece que ignoran o no quieren ver la gran presión económica que soportan todos por estos pagos, desde los “pacos” hasta los nacionales importados y, miran hacia otro lado y silban disimulando, cuando les hablan de Palaus con Milleres, pretorianos y demás fauna. Esta manera de actuar, les da alguno votos cuando se consulta a nativos y nativizados, pero si tiene algo que ver con la realidad callejera, que venga la moreneta y eche un vistazo.
Reconozco, que lo del Cosntitucional, es como para cagarse, revolcarse en la mierda, ponerse al sol a secarse y luego no lavarse, pero, ¿no sería mejor, “escombrar” primero la casa propia y luego ir a barrer la ajena? ¿No sería más instructivo predicar con el ejemplo antes de ir a dar lecciones a corral ajeno? Porque nadie me dirá que no es un buen negocio eso de que por aquí los cargos electos tengan un sueldo mucho más gordo que, incluso Pep Lluís ZP y, que a la hora de meter la tijera, se prefiera hacerlo sobre la Sanidad, Educación, Policía y demás órganos o instituciones dependientes de la Generalitat.
David José, que es un mosso de vocación, “diu avui” en el Periódico de Catalunya:
[– ¿Cómo se han tomado los agentes el tijeretazo?
–Mal. A nosotros siempre nos toca recibir. Hace poco que alcanzamos la equiparación salarial con los Bomberos. ¡Nuestro trabajo también es de riesgo! Ahora que finalmente lo habíamos conseguido, nos pasa esto. No lo entendemos.
– ¿Cuánto cobra un mosso?
–De media 2.100 euros brutos. Si se aplica la reducción, perderemos entre 1.300 y 1.400 euros al año. Le aseguro que ser agente es cuestión de vocación y no de sueldo.
–Usted representa a unos 6.000 agentes, entre mossos y policías locales, ¿qué medidas tomarán?
–Queremos proponer que, ya que nos recortan el sueldo, equiparen nuestros derechos a los del resto de ciudadanos. A los policías no nos consideran trabajadores.
– ¿Perdón?
–No tenemos derecho a huelga y, además, por el simple hecho de ser mossos no podemos tener otros trabajos; ni siquiera trabajar en negocios familiares. Si nos bajan el sueldo, que nos dejen la posibilidad de buscarnos la vida. De momento, solo podemos hacer 75 horas de docencia a funcionarios, trabajos artísticos o literarios, y participar en la dirección, no en el trabajo, de un negocio familiar.
– ¿Se manifestarán el 8 de junio?
–No lo sabemos. Nuestra organización es apolítica y sobrevivimos gracias a las aportaciones de nuestros afiliados. Si los sindicatos mayoritarios realmente quieren batallar para que no se toquen las nóminas de los funcionarios, podrían empezar por no pedir subvenciones millonarias. Es fácil pedir sacrificio al resto y no hacer nada.
– ¿Qué piensan hacer ustedes?
–El 3 de junio iremos al Parlament y entregaremos una carta al president Montilla. Iremos conjuntamente con el sindicato ErNe, de la Ertzaintza, el de la Foral [Navarra] y sindicatos de policías locales de España. Seguramente también se juntarán la Guardia Civil y la Policía Nacional. Los objetivos son mostrar nuestro desacuerdo y proponer a Montilla medidas que nos parecen más efectivas que recortar nuestro sueldo.
–Proponga, por favor.
–Por ejemplo, acabar con altos cargos prescindibles o acabar con estudios, informes y asesores inútiles. Mire, lo que no puede ser es que pidan sacrificios a los trabajadores y que sigan saliendo escándalos como el del Palau de la Música.
– ¿Solo se hará en Catalunya?
–No, acudiremos a todos los gobiernos. El 27 de mayo, todos vamos a Bilbao.
–Oiga, ¿por qué se hizo mosso?
– ¿Yo? Porque me encanta este trabajo. De joven era voluntario de la Cruz Roja y luego me hice mosso. Tengo vocación de ayudar a la gente.
–Y, pese al recorte, ¿seguirá saliendo a la calle?
– ¡Por supuesto! Le aseguro que ningún mosso trabaja por el sueldo. Esta es una profesión de riesgos, legales y físicos. Nuestro trabajo es examinado por jueces. Si según su criterio no hemos actuado bien, entonces tenemos condenas. Cuando salimos a la calle, no sabemos qué pasará. Todos hemos sufrido alguna agresión.
–Usted patrulla, ¿qué se dice en la calle?
–La crisis radicaliza las opiniones. Y de esta crisis no tenemos la culpa ni los trabajadores ni los inmigrantes. Esto tiene que quedar claro. Si se hubiera administrado bien el dinero público, ni nosotros ni nuestras familias estaríamos sufriendo esto.
– Y, ¿cómo respira?
–Hay mucha gente que roba comida en supermercados. Sobre todo se llevan paquetes de embutidos porque son fáciles de esconder entre la ropa. Esa gente sí lo pasa mal.
–En ese caso, ¿qué hace?
–Decirles que lo devuelvan y, si el supermercado no presenta denuncia, se van. Le aseguro que la mayoría son buenas personas, pero sin dinero para comprar comida. ]
Hay diferencia ¿no?.
Salud.
Por aquí (el oasis), algunos de nuestros representantes políticos se salen por la tangente y, sin conocer el percal, lanzan a bombón, platillos y castañuelas eso de que hay que eliminar el PER, en Estremadura y Andalucia porque es un dispendio que se debe atajar y que socava las arcas públicas, arcas, que según ellos, se llenan gracias a los dineritos que aportan “los catalanes”. Claro, quieren decir ellos, porque “els altres” no. Parece que ignoran o no quieren ver la gran presión económica que soportan todos por estos pagos, desde los “pacos” hasta los nacionales importados y, miran hacia otro lado y silban disimulando, cuando les hablan de Palaus con Milleres, pretorianos y demás fauna. Esta manera de actuar, les da alguno votos cuando se consulta a nativos y nativizados, pero si tiene algo que ver con la realidad callejera, que venga la moreneta y eche un vistazo.
Reconozco, que lo del Cosntitucional, es como para cagarse, revolcarse en la mierda, ponerse al sol a secarse y luego no lavarse, pero, ¿no sería mejor, “escombrar” primero la casa propia y luego ir a barrer la ajena? ¿No sería más instructivo predicar con el ejemplo antes de ir a dar lecciones a corral ajeno? Porque nadie me dirá que no es un buen negocio eso de que por aquí los cargos electos tengan un sueldo mucho más gordo que, incluso Pep Lluís ZP y, que a la hora de meter la tijera, se prefiera hacerlo sobre la Sanidad, Educación, Policía y demás órganos o instituciones dependientes de la Generalitat.
David José, que es un mosso de vocación, “diu avui” en el Periódico de Catalunya:
[– ¿Cómo se han tomado los agentes el tijeretazo?
–Mal. A nosotros siempre nos toca recibir. Hace poco que alcanzamos la equiparación salarial con los Bomberos. ¡Nuestro trabajo también es de riesgo! Ahora que finalmente lo habíamos conseguido, nos pasa esto. No lo entendemos.
– ¿Cuánto cobra un mosso?
–De media 2.100 euros brutos. Si se aplica la reducción, perderemos entre 1.300 y 1.400 euros al año. Le aseguro que ser agente es cuestión de vocación y no de sueldo.
–Usted representa a unos 6.000 agentes, entre mossos y policías locales, ¿qué medidas tomarán?
–Queremos proponer que, ya que nos recortan el sueldo, equiparen nuestros derechos a los del resto de ciudadanos. A los policías no nos consideran trabajadores.
– ¿Perdón?
–No tenemos derecho a huelga y, además, por el simple hecho de ser mossos no podemos tener otros trabajos; ni siquiera trabajar en negocios familiares. Si nos bajan el sueldo, que nos dejen la posibilidad de buscarnos la vida. De momento, solo podemos hacer 75 horas de docencia a funcionarios, trabajos artísticos o literarios, y participar en la dirección, no en el trabajo, de un negocio familiar.
– ¿Se manifestarán el 8 de junio?
–No lo sabemos. Nuestra organización es apolítica y sobrevivimos gracias a las aportaciones de nuestros afiliados. Si los sindicatos mayoritarios realmente quieren batallar para que no se toquen las nóminas de los funcionarios, podrían empezar por no pedir subvenciones millonarias. Es fácil pedir sacrificio al resto y no hacer nada.
– ¿Qué piensan hacer ustedes?
–El 3 de junio iremos al Parlament y entregaremos una carta al president Montilla. Iremos conjuntamente con el sindicato ErNe, de la Ertzaintza, el de la Foral [Navarra] y sindicatos de policías locales de España. Seguramente también se juntarán la Guardia Civil y la Policía Nacional. Los objetivos son mostrar nuestro desacuerdo y proponer a Montilla medidas que nos parecen más efectivas que recortar nuestro sueldo.
–Proponga, por favor.
–Por ejemplo, acabar con altos cargos prescindibles o acabar con estudios, informes y asesores inútiles. Mire, lo que no puede ser es que pidan sacrificios a los trabajadores y que sigan saliendo escándalos como el del Palau de la Música.
– ¿Solo se hará en Catalunya?
–No, acudiremos a todos los gobiernos. El 27 de mayo, todos vamos a Bilbao.
–Oiga, ¿por qué se hizo mosso?
– ¿Yo? Porque me encanta este trabajo. De joven era voluntario de la Cruz Roja y luego me hice mosso. Tengo vocación de ayudar a la gente.
–Y, pese al recorte, ¿seguirá saliendo a la calle?
– ¡Por supuesto! Le aseguro que ningún mosso trabaja por el sueldo. Esta es una profesión de riesgos, legales y físicos. Nuestro trabajo es examinado por jueces. Si según su criterio no hemos actuado bien, entonces tenemos condenas. Cuando salimos a la calle, no sabemos qué pasará. Todos hemos sufrido alguna agresión.
–Usted patrulla, ¿qué se dice en la calle?
–La crisis radicaliza las opiniones. Y de esta crisis no tenemos la culpa ni los trabajadores ni los inmigrantes. Esto tiene que quedar claro. Si se hubiera administrado bien el dinero público, ni nosotros ni nuestras familias estaríamos sufriendo esto.
– Y, ¿cómo respira?
–Hay mucha gente que roba comida en supermercados. Sobre todo se llevan paquetes de embutidos porque son fáciles de esconder entre la ropa. Esa gente sí lo pasa mal.
–En ese caso, ¿qué hace?
–Decirles que lo devuelvan y, si el supermercado no presenta denuncia, se van. Le aseguro que la mayoría son buenas personas, pero sin dinero para comprar comida. ]
Hay diferencia ¿no?.
Salud.
