Cada año, el 1 de noviembre, España celebra su fiesta ritual en recuerdo y honra de sus parientes fallecidos, fiesta que se conoce como el Día de Todos los Santos. En toda la nación, muchas familias, especialmente aquellas generaciones mayores que están más apegadas a las tradiciones, se reúnen en los cementerios para hacer una visita a los seres queridos que han fallecido para hacerles saber que no les han olvidado. Algunos incluso visitan el cementerio unos días antes del 1 de noviembre para limpiar las sepulturas y tenerlas preparadas para el gran día.