TIERRA DE CAMPOS. PÀGINA Nº 2El sector agrario en España es un sector estratégico con gran importancia económica, social, territorial y medioambiental. Lo corrobora el hecho de que la mitad de la superficie de España se destina a actividades agrícolas o ganaderas. Además, el sector agroalimentario es uno de los más pujantes de la economía española y la industria agroalimentaria es el primer sector industrial del país. A esto hay que unir la gran diversidad y calidad de nuestras producciones agrarias, el alto nivel de nuestros sistemas de protección de sanidad animal y vegetal y el grado de tecnificación de nuestras explotaciones agrícolas y ganaderas. Si consideramos la situación de algunos de nuestros sectores agrícolas más representativos, nos encontramos en primer lugar con el sector de frutas y hortalizas, que ha consolidado su posición como primer subsector agrario en España aumentando además su valor de la producción hasta los 13.200 millones de euros. Tal es su importancia que solo el sector hortofrutícola aporta el 51% de la Producción Vegetal y el 30% de la Producción de la Rama Agraria. España, con un 25% de la producción comunitaria, se sitúa como el segundo país productor de la UE por detrás de Italia y como sexto país productor a nivel mundial.
Además, las exportaciones continúan siendo clave para el sector hortofrutícola, que destina la mitad de su producción a esta salida de mercado, siendo además el primer subsector de las exportaciones agroalimentarias españolas, primer exportador de la UE y uno de los tres primeros exportadores mundiales junto con China y Estados Unidos. Es importante destacar también la capacidad que ha tenido este sector de reaccionar frente a dificultades como el veto ruso a las exportaciones comunitarias de frutas y hortalizas impuesto en 2014, ya que a pesar de perder este mercado, en los tres primeros trimestres del año 2015 las exportaciones han experimentado un crecimiento. Esto se ha debido al trabajo conjunto del sector productor y de las Administraciones, tanto por haber logrado la continuidad de las medidas excepcionales que la Unión Europea puso en marcha en respuesta a dicho veto como con el intenso trabajo realizado para la apertura de nuevos mercados. Otro sector agrícola destacado es el del aceite de oliva, con una participación del 10% en la Producción Vegetal y el 6% en la Producción de la Rama Agraria. El valor de la producción se sitúa en 2.500 millones de euros y las producciones en este sector han aumentado un 66% con respecto a la media del periodo 1990-2000, pasando de apenas 700.000 ha a en torno a 1.200.000 t, con un importante crecimiento de los rendimientos. España, con el 63% de la producción comunitaria y el 43% de la producción mundial, es el primer productor de aceite de oliva en la UE y en el mundo.
El sector del vino aporta el 4% de la Producción Vegetal y el 2,3% de la Producción de la Rama Agraria. La producción media en las cinco últimas campañas es de 42,2 millones de hl, con una producción sometida a gran variabilidad de unas campañas a otras por la fuerte dependencia del cultivo de las condiciones climatológicas (lo mismo que el resto de cultivos agrícolas). España es el tercer productor de vino en la UE, y el tercer productor a nivel mundial tras Italia y Francia, siendo el principal país del mundo en superficie de viñedo. También en este sector, la balanza comercial es positiva, con una tendencia creciente en la evolución de las exportaciones en los últimos años, alcanzándose en 2014 un record en volumen. España se sitúa en tercer lugar en exportación en la UE y a nivel mundial sólo por detrás de Francia e Italia. La relevancia de la ganaderíaPor lo que respecta a los sectores ganaderos, merece una especial atención el sector porcino, sector más importante de nuestra ganadería aportando un 14% de la Producción de la Rama Agraria y un 37% de la Producción Ganadera. Con un 16% de la producción comunitaria, España es el segundo productor europeo por detrás de Alemania y el tercer exportador de la UE tras Alemania y Dinamarca. Es uno de nuestros sectores más activos en el comercio internacional, con unas exportaciones crecientes en los últimos años, alcanzándose en 2014 un nuevo record histórico superando los 1,5 millones de t exportadas, y apuntando los datos de 2015 también valores sin precedentes. Teniendo en cuenta la situación de los sectores agrarios en España y los retos a los que se enfrenta tanto la agricultura europea como la española, se está trabajando con los instrumentos de que se dispone en la PAC para alcanzar los objetivos que permitan abordar estos retos económicos, ambientales y territoriales. Entre los objetivos estaría conseguir un aumento de la competitividad, una mejora de la sostenibilidad y una mayor eficacia. Podemos ver que la internacionalización es una línea de trabajo estratégica y prioritaria para el Ministerio con el fin de que la diversificación de los mercados de exportación contribuya al mantenimiento de la competitividad de estos sectores. Otro aspecto clave, es mejorar la posición de los agricultores y ganaderos en la cadena alimentaria a través de la creación de organizaciones de productores o aumentando la dimensión de las existentes (mediante la fusión o la integración). Por último, es necesario que los distintos sectores sean capaces de adaptar la producción a la demanda de un consumidor que cada vez es más exigente en lo que a cuestiones de calidad, sanitarias y medioambientales se refiere. En este sentido conviene señalar que todos los sectores están haciendo un esfuerzo por adaptarse a las nuevas demandas; por ejemplo, ampliando calendarios de producción, con nuevas variedades y productos de mayor valor económico, así como desarrollando su producción de una manera más sostenible. Por todo esto, la innovación llevada a cabo en nuestro sector agrario juega un papel fundamental y de interés creciente. Cabe destacar también la importancia que tiene la incorporación de jóvenes agricultores a nuestro sector agrario que dinamice y rejuvenezca los distintos sectores. Para ello hay que señalar el impulso y apoyo que se les da con la ayuda adicional que percibirán en el primer pilar de la PAC.,, NAZARIO MATOS..
Además, las exportaciones continúan siendo clave para el sector hortofrutícola, que destina la mitad de su producción a esta salida de mercado, siendo además el primer subsector de las exportaciones agroalimentarias españolas, primer exportador de la UE y uno de los tres primeros exportadores mundiales junto con China y Estados Unidos. Es importante destacar también la capacidad que ha tenido este sector de reaccionar frente a dificultades como el veto ruso a las exportaciones comunitarias de frutas y hortalizas impuesto en 2014, ya que a pesar de perder este mercado, en los tres primeros trimestres del año 2015 las exportaciones han experimentado un crecimiento. Esto se ha debido al trabajo conjunto del sector productor y de las Administraciones, tanto por haber logrado la continuidad de las medidas excepcionales que la Unión Europea puso en marcha en respuesta a dicho veto como con el intenso trabajo realizado para la apertura de nuevos mercados. Otro sector agrícola destacado es el del aceite de oliva, con una participación del 10% en la Producción Vegetal y el 6% en la Producción de la Rama Agraria. El valor de la producción se sitúa en 2.500 millones de euros y las producciones en este sector han aumentado un 66% con respecto a la media del periodo 1990-2000, pasando de apenas 700.000 ha a en torno a 1.200.000 t, con un importante crecimiento de los rendimientos. España, con el 63% de la producción comunitaria y el 43% de la producción mundial, es el primer productor de aceite de oliva en la UE y en el mundo.
El sector del vino aporta el 4% de la Producción Vegetal y el 2,3% de la Producción de la Rama Agraria. La producción media en las cinco últimas campañas es de 42,2 millones de hl, con una producción sometida a gran variabilidad de unas campañas a otras por la fuerte dependencia del cultivo de las condiciones climatológicas (lo mismo que el resto de cultivos agrícolas). España es el tercer productor de vino en la UE, y el tercer productor a nivel mundial tras Italia y Francia, siendo el principal país del mundo en superficie de viñedo. También en este sector, la balanza comercial es positiva, con una tendencia creciente en la evolución de las exportaciones en los últimos años, alcanzándose en 2014 un record en volumen. España se sitúa en tercer lugar en exportación en la UE y a nivel mundial sólo por detrás de Francia e Italia. La relevancia de la ganaderíaPor lo que respecta a los sectores ganaderos, merece una especial atención el sector porcino, sector más importante de nuestra ganadería aportando un 14% de la Producción de la Rama Agraria y un 37% de la Producción Ganadera. Con un 16% de la producción comunitaria, España es el segundo productor europeo por detrás de Alemania y el tercer exportador de la UE tras Alemania y Dinamarca. Es uno de nuestros sectores más activos en el comercio internacional, con unas exportaciones crecientes en los últimos años, alcanzándose en 2014 un nuevo record histórico superando los 1,5 millones de t exportadas, y apuntando los datos de 2015 también valores sin precedentes. Teniendo en cuenta la situación de los sectores agrarios en España y los retos a los que se enfrenta tanto la agricultura europea como la española, se está trabajando con los instrumentos de que se dispone en la PAC para alcanzar los objetivos que permitan abordar estos retos económicos, ambientales y territoriales. Entre los objetivos estaría conseguir un aumento de la competitividad, una mejora de la sostenibilidad y una mayor eficacia. Podemos ver que la internacionalización es una línea de trabajo estratégica y prioritaria para el Ministerio con el fin de que la diversificación de los mercados de exportación contribuya al mantenimiento de la competitividad de estos sectores. Otro aspecto clave, es mejorar la posición de los agricultores y ganaderos en la cadena alimentaria a través de la creación de organizaciones de productores o aumentando la dimensión de las existentes (mediante la fusión o la integración). Por último, es necesario que los distintos sectores sean capaces de adaptar la producción a la demanda de un consumidor que cada vez es más exigente en lo que a cuestiones de calidad, sanitarias y medioambientales se refiere. En este sentido conviene señalar que todos los sectores están haciendo un esfuerzo por adaptarse a las nuevas demandas; por ejemplo, ampliando calendarios de producción, con nuevas variedades y productos de mayor valor económico, así como desarrollando su producción de una manera más sostenible. Por todo esto, la innovación llevada a cabo en nuestro sector agrario juega un papel fundamental y de interés creciente. Cabe destacar también la importancia que tiene la incorporación de jóvenes agricultores a nuestro sector agrario que dinamice y rejuvenezca los distintos sectores. Para ello hay que señalar el impulso y apoyo que se les da con la ayuda adicional que percibirán en el primer pilar de la PAC.,, NAZARIO MATOS..
