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CASTROVERDE DE CAMPOS: Alfonso IX, REY soberano de León. concedió un fuero...

Alfonso IX, REY soberano de León. concedió un fuero especial a Castroverde de Campos, al que estaba ligado "Barcial de la Loma" y otra docena de pueblos. DEMOSTRACIÒN PALMARIA DE LA IMPORTANCIA  QUE REPRESENTABA  EN TIERRA DE CAMPOS CASTROVERDE DE CAMPOS. BARCIAL DE LA LOMA //A TRES KILÒMETROS DE CASTROVERDE// ESTABA INCLUIDO ENTRE LAS VILLAS ANEXAS A  CASTROVERDE. ESTO NO ES LEYENDA LO CONFIRMA LA HISTORIA. ESPECIAL MUNICIPALISMO. EL PATRIOMONIO DE CASTILLA Y LEÓNLa villa se alza como símbolo de la arquitectura tradicional castellana, además la Iglesia de San Pelayo alberga uno de los retablos platerescos más bellos de la provincia de ValladolidLa figura de San Pelayo preside el retablo plateresco del templo. Su nombre siempre ha estado mezclado con grandes apellidos de la nobleza castellana. Ya aparece como Barceale de Lomba en el año 1095 y se benefició de las decisiones de Alfonso IX, soberano de León. El rey concedió un fuero especial a Castroverde de Campos, al que estaba ligado Barcial de la Loma y otra docena de pueblos, lo que se tradujo en seguridad y refugio para los vecinos. Más tarde, la villa pasó a estar bajo el dominio de Juan I, que donó la villa a Gutiérrez González de Quijada. Barcial de la Loma:«Los servicios son fundamentales para el desarrollo del patrimonio»
El conde de Peñaflor también la tuvo entre sus dominios, aunque con el tiempo pasó a formar parte de las posesiones del marqués de Alcañices, para terminar bajo el influjo del conde de Fuensaldaña. Bajo todos ellos se fue creando el patrimonio de la localidad, del que ahora quedan bellos vestigios. Como el perfecto arco que perteneció a la Iglesia de San Miguel. RetabloEl elemento arquitectónico ha permanecido en pie, mostrando su exquisita belleza a pesar de que el templo se declaró en ruinas en 1755. El arco ha desafiado al tiempo y crea una delicada estampa con el campo castellano a sus espaldas. Los eternos románticos han encontrado en ella inspiración desde el siglo XIX. Por encima de la villa se erige la Iglesia de San Pelayo, un templo originario del siglo XVI que mezcla estilos, lo que refleja el crecimiento y las restauraciones que ha sufrido con el paso de los años. Cúpula de una de las capillas en el interior de la iglesia de San Pelayo. Entre los añadidos se distingue claramente la influencia del arte mudéjar, que confiere una personalidad innegable al edificio. Su planta de salón se divide en tres naves cubiertas con un precioso artesonado, que ahora espera ser rehabilitado. En el interior descansa un bello retablo de 1525, que los expertos atribuyen a algún artista cercano a Juan de Valmaseda. De estilo plateresco, se divide en banco y tres cuerpos. En el primero se puede admirar a San Sebastián, San Roque y San Pelayo, que está acompañado de dos relieves más, que hablan sobre su vida. En el segundo cuerpo, se colocaron dos esculturas de los Santos 'Juanes' y otros dos relieves, uno de la Flagelación y otro sobre la Resurrección. En el tercero y último se encuentra el Calvario, con María Magdalena y Santa Margarita a los lados. Y dos relieves, uno con el Camino del Calvario, y otro con la representación de la Piedad. El nombre de la villa ya aparece en el año 1095 como Barceale de Lomba. NAZARIO MATOS.