Como el viento que castiga las soledades del alma, hay lugares que te obliga para que goces de calma.
El viento corre ligero buscando sendas pérdidas, y no sabe de dinero ni comprende despedidas. La noche se va acercando con sus pesares a cuestas, en ella vamos mirando cuando los años se restan.
Hay sombras que nos amargan, sí en la vida nos desprecian, se vuelven las noches largas y hasta los vientos arrecian.
Noches cargadas de vida,
noches donde suena el viento, a veces se ve la herida del ... (ver texto completo)
El viento corre ligero buscando sendas pérdidas, y no sabe de dinero ni comprende despedidas. La noche se va acercando con sus pesares a cuestas, en ella vamos mirando cuando los años se restan.
Hay sombras que nos amargan, sí en la vida nos desprecian, se vuelven las noches largas y hasta los vientos arrecian.
Noches cargadas de vida,
noches donde suena el viento, a veces se ve la herida del ... (ver texto completo)