De pastor alistano a “amo” en Frankfurt:: PÁGINA Nº 5. En Alemania, reconoce “caí de pie” y entró a trabajar en el sector ferroviario: departamento de autobuses donde había una gasolinera y los alemanes no querían hacer horas extraordinarias. Los españoles si: “No sé porque me verían un poquitín más tonto o un poquitín más listo me dijeron que si quería ir y yo porque no voy a ir”. Le enseñaron a conducir para cuando dejaban un coche en la gasolinera coger echarle gasolina y llevarlo para el taller, ... (ver texto completo)