El domingo de mañana, pasé por la
plaza, como siempre hago, cojo mi periódico y mi
pan. Casualidades de la vida, me encuentro de charla al de. Pedro y a de. Mariano. No puedes por mucho que lo intentas, es pensar!! que hacen estos dos charlando tan amigablemente en visperas de pactos. Bien, yo no digo que la oposición no Deva hablar con quien tenga a gusto, pues es su obligación, no esta escrito en ninguna parte que se tengan que odiarse. Pero a mí, me da siempre una mala sensación, por lo menos
... (ver texto completo)